
Texto por: Ricardo Arriagada Gómez
Actualmente, una película de Luca Guadagnino busca generar reacciones a los espectadores con historias que tienen un punto, y que su profundidad desnuda cientos de cosas. Ya nos enfrentamos en la energética «Desafiantes» en el primer semestre de este año. Pudo haber optado para esperar un tiempo, pero no. Tenemos acá su segunda cinta este 2024 y esa búsqueda de reacciones estará presente.
Anunciada para la parrilla del último Festival de Venecia, el realizador italiano otra vez colabora estrechamente con el guionista Justin Kuritzkes para adaptar la novela de William S. Burroughs del mismo nombre que es casi tramposa en su historia, haciendo pensar que estamos viendo solo una historia de amor, pero que avanzando se transforma en una extrañísima odisea del deseo: Sexualidad, drogas, caprichos y alucinaciones inexplicables.
Nos topamos con William Lee (Daniel Craig), un estadounidense expatriado que recorre el centro de Ciudad de México en los años 50’s para conseguir objetivos personales: drogas y sexo con otros hombres. Se enamora de Eugene Allerton (Drew Starkey), un exmilitar marino donde mantienen una relación íntima y que pondrá a prueba los anhelos que intenta hacer William. Dentro del elenco está Jason Schwartzman, Henry Zaga, Drew Droege, Lesley Manville, el músico Omar Apollo y un cameo especial de otros directores: Ariel Schulman, Lisandro Alonso y David Lowery.

Marcado en tres capítulos y un epílogo, es casi ver dos o tres películas en una misma línea, ya que tenemos un ambiente que hace mucho homenaje a producciones de la época o que hayan inspirado a Guadagnino para mostrar sus provocaciones, y de la nada nos embarcamos a un giro total donde nos hace forzar la mente para captar las metáforas que nos exponen, mientras por nuestros ojos pasan cosas como encuentros intrínsecos -muy abiertos de mente, a quien le complica no nos interesa mucho lo que piense- y los efectos que pasan en el cuerpo cuando uno tiene relación con las drogas. Al final, vemos un viaje interior y exterior de un personaje muy bien interpretado por Craig, que puede ser fácilmente de sus mejores papeles en su vida actoral.
Además de todo lo que logra montar con Starkey en cada escenario y lugar, todo es bien llevado con cuidado en el uso de color y montaje, dando menciones también a los personajes de Schwartzman y Manville que son irreconocibles en pantalla. A pesar de todo, el film expone a su vez cambios bruscos y surrealistas que no se pueden analizar directamente, y lo dicho con parecer tres películas en una, queda la confusión de qué trama es más llamativa, quedándonos más con su provocación en lugar de su poder unánime.
«Queer» ofrece demasiado y es raro poder enfocarnos en solo un punto, pero es otro trabajo efectivo del director y seguro encantará a los que son más abiertos al Cine Arte, pues en miradas más generales lo logrado en «Call Me By your Name» (2017) o en su anterior trabajo del trío amoroso en el tenis logran mayor camino en lo que se destaca la fuerza y reto cinematográfico. Está disponible en la cartelera nacional a partir de hoy con distribución de BF Distribution y próximamente en la plataforma MUBI. Importante: para mayores de 18 años debido al contenido sexual.
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