Niños del Cerro en Club Blondie: Un show que vibró al ritmo de sus fanáticos

Texto por: Ronnie J.C

Fotografías: Darling Castro

Descrita como “La más grande tocata” por su vocalista Simón Campusano, la banda Niños del Cerro culmina la mitad de su gira Suave Pendiente en el Club Blondie este 29 de abril luego de un show que duró aproximadamente 3 horas.

Ya eran las 7:00 pm cuando los cubos que decoraban el techo destellaban su luz azul hacia el público que se alistaba para disfrutar el show, unos haciendo fila para pedir su cerveza, otros en los rincones sentados con sus amigos, y el grupo más fanático, ya se había tomado toda la barricada para tener la mejor vista del espectáculo. El juego de luces del escenario reemplazó la iluminación azul, anunciando el tan esperado punto de inicio del show. 

Aunque no hay duda del excelente tono de voz de Simón al cantar, sus  fanáticos se llevaron el centro de atención durante la primera presentación de la noche  «Povidona» infectando, irónicamente, todo el club. Así mismo, los asistentes mantenían  un ritmo incesante en los temas posteriores como «Tentempié» y «Miel», y sin faltar un toque especial de luces amarillas representando las letras de «Mi Ceguera Más Personal».

El público aprovechó la pausa antes de «Azucena» para desear entre canto y aplausos un Feliz cumpleaños al tan querido vocalista de la banda, quien soltó un “gracias”  sincero y prosiguió con el espectáculo. El quinto tema «Tamarugal» inició con las palmas de la audiencia que iban al ritmo del solo de batería a cargo del miembro de la banda José Mazurett, tanto el escenario como el público fueron bañados en una luz rosa, que resaltaba el lazo especial de la banda con cada uno de sus fanáticos. Una guitarra acústica tomó el lugar de la guitarra eléctrica del vocalista Simón para ir acorde con el ambiente lento y melancólico de  «Frío Frío», y al culminar, se unió a escena la artista invitada Florencia, su dulce voz hizo dueto con Simón para interpretar «Enorme Distancia» y «Vía Completativa». 

El guitarrista Ignacio Castillo y el bajista Felipe Villarubia protagonizaron gran parte del majestuoso solo de la canción «Daniel»,  donde el público se mantuvo, en todo momento, con las palmas arriba  y meneando la cabeza, demostrando cada segundo cómo vivían la interpretación, el tecladista no se quedó atrás, deslumbró su talento al tocar «El Dulce en la Piel de Tu Nombre» y así, la banda siguió la fiesta de instrumentos con los temas «Mamire» y «La Sombra Quieta». La nostalgia de las letras  “Viento en enero,  lluvia en Febrero” de la canción «Le Entrego Mi Alma al Vacío Como Una Ofrenda de Amor» fue expresada por la voz al unísono de la audiencia mientras el escenario estaba cubierto de luces lilas, las cuales cambiaron a una luz blanca tenue para terminar con broche de oro los temas del álbum «Suave Pendiente»  al interpretar la melancólica melodía  «Noche Oscura».

La banda regresó al escenario para el segundo bloque usando una ropa más ligera, para vivir más ameno la energía del público al tararear sus mejores éxitos, entre «Durmiendo en el Parque», «Las Distancias», «Contigo» y enloquecerlos con un solo de orquesta que llevó a su vocalista Simón hasta el suelo por la inevitable emoción provocada al interpretar «Lance». “Muchas gracias por este momento”  expresó Simón conmovido, mientras sonreía observando al público, anunció la última canción, “Esta es para ustedes” fue lo que dijo luego de preguntar quiénes de los asistentes los habían acompañado desde el inicio, y así, tocaron el tema. «Nonato Coo», primera canción de su primer álbum de estudio lanzado en el 2015, que lleva el mismo nombre, y que hizo temblar al Club Blondie por última vez en la noche gracias a la energía infinita que emitió los seguidores de la banda hasta que el vocalista hizo retumbar su guitarra en el piso sellando el final del show.

Niños del Cerro es conocida por llegar a los corazones de jóvenes-adultos, y este pasado sábado demostró la gran conexión que tiene con su público. El sueño de todo artista debe ser, probablemente, cantar en un escenario frente a un gran público. Pero la mayor satisfacción se la llevan consigo los artistas que tienen la dicha de escuchar, no un simple tarareo, sino los gritos de toda su audiencia coreando cada letra de sus canciones con vigor. Y  Niños del Cerro, es una de esas bandas que lo logró.

Revisa la galería fotográfica completa del show aquí.