Álbum: «Luck And Strange»

Artista: David Gilmour

Género(s): Blues Rock

Año: 2024

Texto por: Tomás Bascoli

Como un relámpago en medio de la noche, David Gilmour presenta su quinto álbum de estudio llamado «Luck And Strange». Un trabajo brillante y resplandeciente en cuanto se oye el reconocible sello del ex guitarrista de Pink Floyd. Un disco introspectivo y profundo en cuanto a lírica y sonido, así también llamativo en su forma de desplegarse, tal como una interrogante filosófica que nos deja pensando.

El inglés nos presenta un compilado de ocho temas y dos bonus track que podrían tranquilamente ser un álbum por sí solo. Lo más excéntrico es que la placa puede resumirse de la mejor forma con estas dos últimas canciones que no pertenecen a la “formación original”.

En primer lugar esta «Yes, I Have Ghosts» que es cantada en conjunto con su hija Romany Gilmour a partir de una letra de su esposa Polly Samson. Con ella queda claro que el guitarrista quiso que su familia sea protagonista del álbum y que, a partir de allí, apareciese cierta frescura en su trabajo, especialmente con la incorporación en voz y harpa de Romany. Junto a su familia, también se desprenden las temáticas del disco que apunta hacia la introspección rumiante del futuro y la mortalidad para él y todos quienes lo rodean, como ocurre en «Between Two Points».

Por otro lado, tenemos la segunda canción escondida del álbum que sorpresivamente se denomina «Luck And Strange», pero es una versión de 14 minutos de duración a partir de una sesión junto al tecladista Richard Wright, ex compañero de Gilmour en Pink Floyd quien falleció en 2008. Esta pieza es indudablemente la imagen del álbum a través de la elegante guitarra de Gilmour en conjunto con elementos sonoros atmosféricos y la embrujada voz del compositor de «High Hopes». Y no es mera fortuna que nombre esta canción, sino que el grueso musical del álbum recuerda mucho el trabajo «The Division Bell» (1994).

Estos dos puntos característicos de ambas canciones “secretas” son las armas centrales de «Luck And Strange». Por un lado, la familiaridad y frescura de quienes se encargaron de la composición y producción de los temas, y por el otro, el sello musical del propio Gilmour a través del Blues, el Rock, sus solos de guitarra y el teclado tan pinkfloydesco. Canciones como «The Piper’s Call», «Scattered» y la mencionada «Luck And Strange» (en la versión que llega finalmente al disco) aparecen como los mejores productos logrados del álbum y que maravillan al oído a partir de estos dos elementos que se van combinando a la perfección. Lo viejo y lo nuevo se van entrelazando a medida que avanza el álbum.

En fin, «Luck And Strange» es traído a ustedes empujado por toda la familia Gilmour inmersa en el interior del alma y cerebro musical del padre. En una especie de aparición fulminante entremedio del silencio que nos deja pensando sobre lo oído en medio de cada una de las canciones. Una invitación a sentarse junto al clan Gilmour y meditar en familia sobre el futuro y la mortalidad de todo lo pasado, presente y futuro.

¿Qué escuchar?: Luck And Strange / The Piper’s Call / Between Two Points / Scattered / Luck And Strange (Original Barn Jam)

Lista de canciones:

01. Black Cat

02. Luck And Strange

03. The Piper’s Call

04. A Single Spark

05. Vita Brevis

06. Between Two Points

07. Dark And Velvet Nights

08. Sings

09. Scattered

10. Yes, I Have Ghosts

11. Luck And Strange (Original Barn Jam)


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