Texto por: Ricardo Arriagada Gómez

El director irlandés John Crowley ha tenido una carrera tambaleante, con títulos de gran recepción y cariño como «Brooklyn» (2015), y algunos tropiezos, incluyendo su anterior film «El Jilguero» (2019) es parte de su currículo. Este año, presenta una película que seguramente, ablandará muchos corazones, al punto de que, aquellos que gustan de estas historias será un río lleno de lágrimas.

Un guion hecho por Nick Payne en su primer guion original para un largometraje, combina de manera muy marca los géneros del Romance con el Drama, intentando mostrar lo más real posible un relato entre una pareja y los altibajos que implican, desde el apoyo y la sinceridad. Mientras más cercano a la realidad, mayor su aprecio.

Es la historia de Tobias Durand (Andrew Garfield), un hombre recién divorciado que conoce de manera accidentada -dicho literalmente- a Almut Brühl (Florence Pugh), cocinera y dueña de un restaurante. En el trascurso del tiempo, podemos ver cómo se enamoran, logran formar una familia, vivir momentos tensos y estar en las circunstancias difíciles. Dentro del elenco están Adam James, Marama Corlett, Aoife Hinds, Nikhil Parmar, Heather Craney y Douglas Hodge.

El gran detalle que presenta este trabajo es su forma de contar, se presenta de manera no lineal los acontecimientos, por lo que veremos a ambos juntos, pasando a otro plano en escenas donde se están conociendo y así, desde lo que está en su presente o cómo se desarrolló su amor. Esta idea puede ser dinámica en darle otro ritmo para que no se sienta plana y después explota, sino que intenta crear una montaña rusa de emociones. Su pequeña desventaja es que, a veces puede llegar a confundirnos en no saber por unos segundos dónde se sitúan las vivencias.

Los factores más destacables son, por supuesto, las actuaciones de Andrew y Florence, porque no agotan ni se exceden, y entre ellos pueden generar esa voluntad de crear una buena química para la representación de una pareja de padres, el objetivo de vivir al máximo y estar el uno por el otro a pesar de todo, esto último se refleja en ciertas escenas llamativas que, logran generar hasta incomodidad, pero es lo que hay de fondo cuando nos referimos que así es la realidad, cruda y hermosa en diferentes escalas. En formas técnicas no sorprende, pero sí es cuidadosa en los enfoques y ambientaciones.

Es una gran película, reflexiva y que consume correctamente sus 108 minutos de duración, y se comprende cuando más de alguno le puede llegar más la emoción al enfrentarse con esta historia, que es tan honesta, y puede significar lo que valioso que es conservar tolerancia y guardar muy bien los preciosos recuerdos dentro de lo frágil que es la vida en nuestra salud o en las oportunidades exclusivas. La cinta llega este jueves 28 de noviembre a cines nacionales con distribución de BF Distribution.


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