25 años de «Stories From The City, Stories From The Sea»: Paseando con PJ Harvey

Álbum: Stories From The City, Stories From The Sea

Artista: PJ Harvey

Género(s): Rock/ pop

Año: 2000

Texto por Clau B. Díaz

PJ Harvey es una de las artistas más relevantes del rock; por más de 30 años, la multinstrumentista nos ha entregado un amplio estilo sorprendiéndonos con cada álbum. Por esto, es que queremos celebrar uno de sus grandes discos lanzado hace 25 años, el alabado por la crítica y los fans: “Stories From The City, Stories From The Sea”.

Pero para adentrarnos al álbum, primero, un poco de contexto…

A fines de la década de 1990 y principios de los 2000, vivíamos en mundo frenético que cada vez iba más rápido. Veníamos de un década en que pasamos de sonidos distorsionados y letras viscerales al pop más comercial y digerible. ¿Quién puede culparnos? El futuro se nos venía encima, estábamos decodificando el genoma humano, supimos que el universo se expandía aceleradamente, las alarmas por el cambio climático estaban encendidas, por las noticias escuchábamos de las guerras Yugoslavas, el libre mercado se instalaba como sistema económico, mientras algo llamado internet entraba en nuestras vidas. Una época de esperanza apocalíptica; Stories From The City…, es exactamente eso. 

Por eso, quizás, Harvey usó como telón de fondo New York. Una ciudad frenética, con sus luces que nunca se apagan, semáforos cambiando de color, autos por la calles tratando de llegar a un lugar, bocinas, bullicio, trabajos, pasos, el metro, las micros, la publicidad, los edificios que quieren tocar el cielo. Una ciudad sin sueño como escribió alguna vez Federico García Lorca. Porque acá los lugares no son solo puntos en el espacio-tiempo, sino que son sensaciones. Como esa de escapar del mundo porque está todo podrido de la canción que abre el álbum, “Big Exit”, o el (des)amor en “Good Fortune”.

El sentimiento de que algo termina atraviesa el álbum, ya sea la juventud, el mundo o una relación amorosa. De esto último nos canta en “This Mess We’re In”, un dúo con Thom Yorke que representa a una pareja que terminó su relación. Una delicia de tema, no solo porque ambos son una genialidad, sino porque habla de lo que vivieron como una experiencia que la recuerdas con todo el cuerpo. Sin tristeza ni odio, es más, con mucha carnalidad y sensualidad. Aunque esté presente una idea apocalíptica, de cambio o de desamor, es un disco más luminoso y alegre que sus predecesores. Quizás tenga que ver con el desarrollo del lóbulo frontal y a PJ Harvey ya no le interese ir contra el mundo o luchar, sino aceptar y abrazar todo lo que viene, sin importar si es bueno o malo, tal como lo aconseja en “We Float”: “Take life as it comes”.

Lo luminoso del álbum se refleja en su sonido más pop que se diferencia de sus trabajos anteriores. Por ejemplo, la canción “A Place Called Home”, habla de la esperanza de llegar a un lugar seguro, la música quiere llevarte a esa sensación de seguir adelante, que la vida de alguna manera te llevará ahí, de hecho, te ves caminando hacia allá. Que el disco sea, por decirlo, más limpio, sin la crudeza de “Dry” (1992) o “Ry of Me”(1993), logra que las sensaciones sean menos nebulosas. Si bien, nos sumergimos en la ciudad con luces que encandilan, el camino siempre se ve y siempre está en movimiento. 

Stories… es un álbum cinematográfico, lo puedes ver mientras lo escuchas, tanto que me aventuro a asegurar que alguna de las canciones debe estar en una playlist nombrada: canciones-para-andar-por-la-ciudad-y-sentirte-en-tu-propiop-videoclip. Porque en la ciudad dejamos todos nuestros pensamientos, ¿quién no ha estado caminando o arriba del transporte tan absorto en los pensamientos que sigues de largo? Harvey explora y refleja todas esas experiencias. Con respecto al título, en una entrevista le preguntaron si el nombre tenía que ver con la idea de Jung de la ciudad como consciente y el mar como subconsciente, a lo que PJ respondió que le atrae esa idea, de estar entre la tierra y el mar, en un estado semiconsciente. 

La ciudad tiene algo de onírico, de inmensidad, de un recordatorio de lo que puede hacer el ser humano. No sé si Harvey quiso hacer un álbum de fin de siglo, o reflejar la ansiedad del momento, pero sí siento que es una síntesis de lo que fue la década de 1990 para ella, como si todo confluyera ahí, como si nos hubiese preparado para el disco. De cualquier manera, el fin del siglo y del milenio significó cambio de sonidos para muchas bandas. Los 90’s quedaban atrás, aquellos jóvenes se transformaron en adultos, y tal como pasa con la historia, los humanos tenemos que avanzar, en el caso de PJ Harvey, ella lo hace flotando. 

Canciones destacadas: 

“Good Fortune”, “A Place Called Home”, “This Mess We’re In”, “This Is Love”, “We Float”