
Texto por: Claudia Bustos
El pasado domingo 02 de febrero se presentaron en la Sala Metrónomo Mortiis y Nytt Land, quienes, a través de su música, crearon una atmósfera de fantasía neopagana, propia de la Europa Septentrional.
Nytt Land fueron los encargados de abrir. La banda sube al escenario vestidos adecuadamente para el ritual que vivimos durante una hora. El dúo proveniente de Rusia logró transportarnos a un mundo épico de bosque, naturaleza y folclore, en el que la audiencia se sumergió en un trance, rendidos ante los siberianos.

A las 21:00 comienza el show de Mortiis, cuya gira se enmarca en los 30 años de su disco debut «Født Til Å Hersk», el cual fundó el estilo Dungeon Synth. De manera íntegra, Mortiis nos deleitó presentando la totalidad del álbum, volviendo a la esencia, de lo que él mismo llama “el espíritu del Black Metal”. Otra cosa a destacar fue la puesta en escena, además de la característica máscara del artista -que ya de por sí llena el escenario-, se proyectó durante todo el concierto imágenes que recuerda a los grabados de Gustave Doré, dándole un toque oscuro, frío, pero cálido a la vez.


La noche fue como una historia de fantasía de dos volúmenes, en la que la primera entrega, encargada de Nytt Land, nos muestra en mundo en el que se desarrollará la historia: estableciendo las reglas del universo ficcionado. Y la segunda parte, llamada Morttis, se narra el clímax y resolución de la obra, dándonos un final satisfactorio, feliz, y totalmente épico.
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