Texto por: Pablo Castillo

Fotos por: juxnmv

A la mitad de un veraniego tour, a los santiaguinos ya les tocaba volver a casa. Con una Sala SCD llena y con las altas temperaturas en el centro de la capital, Déjenme Dormir nos trae uno de los hitos más grandes de su carrera debutando en este escenario, así también recibiendo finalmente el estreno de estas canciones que nos entregaron en su último proyecto BRONCE (2024) en un concierto propio. 

El show de apertura estuvo a cargo de Frucola Frappe curiosamente en la misma parada que los dueños de la cita, debutando y presentando por primera vez las canciones de su último disco Cielo Falso (2024) -y por más curiosidad ambos reseñados por mi-. El poder de la guitarra en contraste a sus lanzamientos anteriores y como potencian la voz de Camilo fue lo que sostuvo toda la presentación, canciones juguetonas dignas de ser lados-b perdidos de Weezer en los 90’s y mucho ruido ausente en estudio pero que en vivo le da un carnet de identidad a la música bajo el cielo falso de la sala, espero con ansias su propio show en la SCD.

Previando la presentación con el Corazones de Los Prisioneros, el reloj ya marcando las 21:00 horas se apagaron las luces y subieron por las escaleras al costado del escenario los protagonistas de la fecha. Con un setlist que varía entre su debut y las canciones más nuevas de la banda, conciliando un balance para un show perfecto, comenzando como todas las fechas de la gira con LO MÍNIMO y así acostumbrarnos al explosivo y letárgico sonido del nuevo disco. ROMAMONÓTONO LUGAR Florecer mostraban las nuevas dinámicas de la banda, con mucha presencia de voces secundarias, tonos de guitarra super sucios, baladas con acercamiento hacia el Slowcore y el baterista que pareciese está viviendo el mejor momento de su vida.

Tuve la oportunidad de ir hace dos años al lanzamiento de Neumonía (2022), concierto en donde tocaron el disco debut en su totalidad más dos misteriosos temas que me parecieron maravillosos, todo esto vendría siendo parte de un algo que no tendría nombre hasta que se lanzó oficialmente la segunda entrega de la banda. En el lapso de esa tocata al día de hoy las canciones nunca salieron de mi cabeza, pero hoy podemos ponerles nombres, ver como evolucionaron y sentir la misma emoción al borde de la catarsis que hace dos años. Hablo de PRUDENTE y BRONCE que obviamente estuvieron presentes en el show.

Las luces siempre acompañando a la banda y formando una especie de misticismo alrededor de ellos durante la presentación, cambios precisos que llegaban en cortes potenciando la música de manera visual. Los ya clásicos como El Último Cortaviento o Mil Veces Maldito coreados por el público y que llenan ese corazón Indie Rockero con letras adolescentes, en contraste a ARCO o INGENUO que eran en su forma inicial más minimalistas pero que arremetieron con todo a su paso con los pasajes instrumentales llenos de ruido. Pero la guinda del pastel no estuvo en la música, sino literalmente en un pastel cuando le cantamos feliz cumpleaños a Keko, el genio detrás de los solos de guitarra.
El profesionalismo y elegancia del recinto es otro peldaño más para el ascenso de Déjenme Dormir quien logró conquistar Bellavista en una de las mejores presentaciones que ha dado, me ha tocado ver tres veces a la banda en vivo y está en definitiva estuvo a otro nivel. Dejaron el escenario con FLECHA pero volvieron para un pequeño encore interpretando Cimarra dando fin a la cita santiaguina para mañana seguir con el rock en La Serena y en el resto de nuestro país.


Zumbido.cl

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