BLOO en Chile: Asentando el Hip-Hop coreano

Texto por: Catherine Guichard
Fotografías por: Cristian Doppler

La espera terminó y finalmente BLOO se presentó en Club Blondie en una noche mágica y llena de energía.

Encendiendo los ánimos, entra al escenario la DJ Howmini con luces multicolores y remixes de temas conocidos, comenzando con «Unholy» de Sam Smith y pasando por Beyonce, Gwen Stefani, «Despacito» de Luis Fonsi y Daddy Yankee, Daft Punk y hasta la «Macarena». El público claramente disfrutando, bailó y cantó cada uno de las canciones preparándose para lo que se venía.

El artista rapero BLOO, también conocido como Daniel Kim, pisó nuestro país en el marco de su gira mundial «Fox and The City Tour» luego de presentarse en Brasil. Público en su mayoría femenino coreaba su nombre con ansias de ser los primeros testigos de su debut en Chile.

A las 19:00 en punto comienza su presentación con «When I Smoke», provocando un estallido de emociones en los presentes. Se desplazó cómodamente por el escenario derrochando talento y carisma. Con «7 Gold Chains» demuestra por qué es uno de los exponentes más importantes del género, que con una carrera corta ha sabido posicionarse, no en el corte masivo de sus connacionales del K-Pop, pero si siendo renombrado por su capacidad de expresión a través de melodías y buenos arreglos.

Tomando un shot y brindando con los presentes, comienza «Hennessy», con tintes electrónicos y algo de melancolía proyectando un magnetismo innato. En sus tiempos de escuela, y con el nombre artístico de Daniel Prynne, se unió a una comunidad de Hip-Hop coreano-estadounidense que lo llevó a decidirse por crear música fiel a sus convicciones; lo refleja sobre el escenario, con sonidos de la vieja escuela y algo de Soul , Trap y R&B.

Un montón de sostenes con dedicatorias de fans llega desde el público. «This is crazy» dice BLOO, tomándolos orgulloso como un trofeo y deslizándose en su próximo tema sin soltarlos de sus manos. Mención especial a la gran cercanía que proyecta con las personas, acercándose en reiteradas ocasiones hacia la multitud, recibiendo todos los obsequios que cariñosamente le pasaban sus fanáticas y dejándolos con cuidado en la mesa de DJ Howmini, que lo acompañó al fondo durante todo el concierto.

«What’s my name?» pregunta con carisma. «BLOO» responden todos al unísono. «No, my name is Papi», dice como antesala a su canción «Daddy» que corea con gracia. Siguiendo la interacción, luego pregunta «Who wants to kiss me?», para comenzar interpretar «Come and Kiss me» antes de una pausa liderada por la dulce DJ.

«Girl In New York» suena fuerte, con una lírica romántica pero un beat relajado, de esos que te hacen querer bailar serena y apaciguadamente. Luego de la conocida «Drama», cientos de globos forman un mar azul, grabando en la memoria de los presentes la reservada e inigualable noche.

Cierra con «Downtown Baby», su canción estrella, alejada de sonidos agresivos que navegan por un mar de riffs acústicos, piano y voz suave que lo catapultaron a la fama con una letra conmovedora con la que todos pueden identificarse cuando tienen el corazón roto.

Pareciera ser el final, pero nadie planea moverse de sus lugares, ni el mismo BLOO, que luego de varios shots y palabras en español como «Te quiero, te amo, gracias y eres bonita» decide volver a interpretar sus temas más conocidos, mientras hace contacto físico con el público, firma autógrafos y se viste con una gran bandera chilena.

El joven de 28 años es sin duda una figura talentosa con mucho que ofrecer. La íntima cita que se vivió en Club Blondie deja claro que es capaz de expresar con beats sus melancólicas letras denotando que la escena underground del Hip-Hop viene para quedarse. Estamos ansiosos por sus próximos pasos y esperamos que se repita la visita para hacer el After Party.