Texto por: Lucas Araya
Fotografías: Darling Castro
La diosa del Rap hispanoamericano llega al Teatro Caupolicán este domingo 08 de septiembre con sus versos incendiarios y todo el poder de su música envolvente y llena de melodías mezcladas con su periplo por este mundo y sus extrañezas.
Un show que promete elevarnos más allá de los techos con potencia y entrega de La Mala Rodríguez, la dueña del escenario, el tiempo y el espacio. Una vuelta al recinto donde presentó uno de sus discos más icónicos al público chileno allá por el 2007, con una presentación espectacular, llena de energía y esa lengua filosa lanzando rimas, sentenciando lo que sería un ir y venir constante de la rapera sevillana por estas tierras. En Zumbido.cl recordamos tres momentos icónicos de La Mala Rodríguez para preparar el terreno y encender el encuentro con la maestra del hip hop en español.
01. «Malamarismo» (2007) y la irrupción sin freno
Su tercer disco emergió como una bomba subterránea esparciendo sus ondas sonoras, líricas y estéticas por toda Hispanoamérica. Si bien ya había hecho ruido y se había establecido como una de las voces del nuevo Hip Hop en español, el eclecticismo sónico y la riqueza poética y melódica de La Mala Rodríguez hicieron que los singles y gran parte de las canciones de este álbum sonaran en las radios y fuesen parte de las visualizaciones del incipiente hábito de sentarse a mirar videos en YouTube por horas. Sin dudas, uno de los momentos claves en su carrera y el paso necesario para llegar a los grandes recintos de Chile y Sudamérica ese mismo año. «Nanai» en vivo en la televisión española en 2007, después de cruzar el Océano Atlántico para romper las reglas en estos pagos
02. «33»
En 2013, con más de diez años de carrera y jugando en las grandes ligas del Rap, La Mala liberaba su rabia en «Bruja», un disco áspero con leves dosis de sutileza, un golpe directo a la cabeza para abrir el ceso y despertar las conciencias. La canción «33» es un verdadero estallido sonoro, una granada hecha palabras y una redención de la mierda interna frente a un universo lleno de negatividad. Un paso por encima de los derroteros de la adultez. La figura de la cantante con un bat de Baseball entre las sombras quedó grabada para siempre como el momento de calma antes de la tormenta imparable. Acá el video oficial:
«Directo en pandemia» (2020)
Por supuesto, y como la gran parte de la población mundial, la rapera ibérica vivió el encierro de esos tiempos en su espacio propio, usando las redes sociales como un espacio de expresión y comunicación con su gente. Una de esas largas tardes que se confundían con noches y mañanas confusas, La Mala nos regaló una sesión íntima, un gesto incalculable de amor y resistencia en la era del Lo-Fi sincero. Un bálsamo sonoro y visual. Acá una versión de Yo no pierdo el tiempo:
Bonus: Lollapalooza Chile 2011
La primera versión del festival en Santiago tuvo una lista impresionante de nombres internacionales, esperados y codiciados. Entre todo ese huracán musical, La Mala Rodríguez se apropió del escenario en una tarde en la que el sol quemaba para convertirse en el fuego real y bestial del Rap y la pasión sin freno. Acá un registro de baja calidad tecnológica y de alta entrega humana:
Bonus II: En todas las casas
En 2008 Julieta Venegas nos regaló un impecable show desenchufado que llegó a todos lados a través de las pantallas de MTV. Un lujo total. Sin embargo, uno de los detalles más hermosos de este concierto es el momento en que La Mala comparte escenario con la estrella de la noche para brillar con luz propia y llegar a todos los hogares que se colgaban al cable cuando los canales de música eran relevantes. Así mi mamá pudo ponerle rostro a la española que sonaba en los parlantes de nuestra pequeña casita familiar. Acá la magia pura:
Aún puedes conseguir tus entradas en Puntoticket y ser parte de esta celebración de la música y el fuego en el mundo extraño en el que nos toca compartir oxígeno con La Mala Rodriguez. ¡No te lo puedes perder!
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