Entrevista por: Hugo Hinojosa

Estuvimos con Germán Vergara, guitarrista fundador, y Álvaro Poblete, baterista, ambos miembros de la banda prog nacional Aisles, quienes hablaron en extenso de su trayectoria, sus proyectos actuales y su próxima actuación en la tercera versión del festival Cl.prog, a desarrollarse el próximo 15 de marzo en la explanada de Matucana 100. 

Me gustaría primero que habláramos de estos 20 años de trayectoria. En «The yearning» (2005) partieron con un sonido medio Neoprog y ahí han ido mutando… 

G: Sí, partió neoprog, diría yo, la gente lo conectaba mucho con Marillion. Igual nos asociaban a Camel que es más clásico, a IQ. Algunos nos comparaban, pero para serte sincero, nunca hubo una búsqueda consciente de “tenemos que sonar como Marillion”. Las influencias de la banda eran súper amplias, o sea, desde jazz, pasando por Led Zeppelin, Iron Maiden, música clásica, música electrónica. Partimos con dos tecladistas, uno era del mundo de la música clásica y el otro de la música electrónica, entonces imagínate la fusión, y habíamos dos guitarras, entonces era muy rico en el sentido estilístico.

Claro, entonces me gustaría que nos hablaran cómo se siente ahora Aisles. Porque, como tú dices, en el inicio no había como una intencionalidad de “sonar a”, pero ahora en el tiempo uno va notando como empiezan a aparecer influencias más modernas, desde Riverside a sonidos más pesados en su último single «The dream». Considerando además que hubo cambios de integrantes, ¿cómo es desde tu rol de fundador y Álvaro como integrante más reciente?

G: Sí, bueno, justamente Álvaro entró como a refrescar el sonido, pero yo ya venía de hace un tiempo empujando la banda hacia renovarse. Por ejemplo, en «Beyond Drama» (2023) hay un sonido mucho más actual, un poco más pesado, un poco más directo, y las bandas, creo yo, los artistas tenemos que hacer eso, empujar, evolucionar. A mí me gusta mucho eso, y yo creo que ahora nos pensamos con un sonido moderno, vanguardista, más directo tal vez. 

A: Sí, yo creo que la banda en general, en su historia, siempre tiene una búsqueda y una evolución hacia la modernidad, hacia el concepto de música más del futuro, que así lo llamo yo.

G: Lo que pasa es que partimos en 2005 y era otra la concepción del futuro. (risas)

A: A eso voy, como que siempre he sentido que van para ese lado, y creo que desde «Beyond Drama», según mi oreja (risas), se están acercando a ese futuro de robots, de inteligencia artificial, y creo que eso lo demuestra «Beyond Drama», «Bahamut» (2024).

G: Suena un poco de distopía. En la música de Aisles no significa que todo tenga que ser distópico, pero sí suena como urbano. Urbano no en el sentido que se usa hoy día (risas), sino que citadino. Es difícil decirlo en términos urbanos, en un medio de rock progresivo (risas). Yo siento que esa evolución se entiende como de una urbe hipermoderna, la soledad del ser humano incorporado en esa metrópolis. Eso está en la música de Aisles, como que se respira como el individuo se enfrenta a la modernidad y a sus experiencias, a su vida. 

A: Claro, siento que la banda tiene una evolución que es natural, que no es forzada, que los chiquillos han ido empujando de a poco a través de los años, a esta sonoridad más nueva, más moderna, más de urbe. Más de inteligencia artificial, que lo tomo yo, como la influencia sonora. Entonces creo que se dio justamente ahora, de «Bahamut» hacia adelante, que lo que estamos haciendo empieza a ser mucho más moderno, pero de una manera natural, porque hay una búsqueda constante de eso. Y en “The Dream” se llegó a algo muuucho más actual. 

Una cosa que me parece interesante de «Bahamut» es que, a pesar de que ustedes han hecho discos conceptuales, acá entran directamente en la relación con la literatura. ¿Cómo llegaron a armar el disco y este concepto de la novela con Francisco Ortega? 

J: Yo desde chico tengo una conexión muy profunda con la literatura. No sabía si quería ser escritor, músico o cineasta. De verdad tenía esas dudas, pero el arte era lo mío. Y al final me fui por la música, pero igual terminé haciendo un poco las otras dos cosas, porque me gusta escribir las letras, que tengan un concepto potente, filosófico, literario, poético, e integrar cine. Y con Francisco Ortega, particularmente, lo conocimos porque él es fanático de nuestra música, entonces siempre tuiteaba alguna que otra cosa. Yo dije, “qué curioso, este tipo es bastante conocido, voy a leerme un libro” y me leí «Logia». 

Cuando empezamos a hacer «Beyond Drama», se me ocurrió la idea de que «fast» tuviera un video que fuera un anime. Que fuera justamente una situación distópica, un Santiago del 2080. Aprovecho de invitar a quien esté leyendo la entrevista a que vaya a verlo a YouTube, porque es una animación muy de la onda de «Akira», influenciado por cosas como «Ghost in the Shell», «Blade Runner», todo el mundo Cyberpunk. Entonces cuando yo le propuse ese proyecto a Francisco Ortega me dijo “me encanta”, se sumó al proyecto y no nos cobró ni un peso. 

Fue una colaboración, aunque nos dijo, “esto hagámoslo así. Pero en el futuro puede que los necesite, porque tengo ganas de hacer algo potente, no sé qué. Puede ser una serie.” Y así, lo pasamos súper bien en plena pandemia, escribiendo un guion sobre el fin del mundo. Fue como partió la relación con Francisco Ortega. Un par de años después me llamó por teléfono y me dice, “te llamo para cobrarte la palabra. Quiero musicalizar una novela” (risas). “¿Musicalizar una novela?” Y esa fue la historia de «Bahamut». Yo le dije, “ya, es genial. Me subo”. Esto era un compromiso y ahí empezamos.

Estaba integrado en la banda y nos pusimos a hacer música para una novela que es distinto a hacer para una película, que uno ve imágenes. Más difícil, porque tienes que imaginarte las imágenes. Es como un trabajo mayor, por así decirlo.

A: Musicalizar interpretativo. En ese momento estuvimos todos metidos en lo que era el libro. Hubo que leer la novela, tratar de entender lo que Francisco decía. Y de partida el libro no es un libro fácil de digerir. Es un libro muy bacán, pero tienes que leerlo con atención. 

J: Super recomendado, pero no es para leerlo en la micro. Es como que tienes que hacer un esfuerzo, porque va para el futuro al pasado. Por ejemplo, «3.514», que es el nombre de una de las canciones, es porque una inteligencia artificial del año 3.514 contacta a alguien en el 2018. Es todo un mundo bien interesante. 

A: Va para todos lados, tienes que estar ahí leyéndolo bien concentrado. Entonces no fue fácil el desafío, y lo hicimos en un tiempo muy acotado. Lo hicimos como en uno o dos meses, ponte tú. Pero hubo que leer el libro y al mismo tiempo hacer la música. Y hacerlo todo en ese tiempo (risas) contra todo, mucho trabajo. Lo pasamos muy bien con Germán, pero ese proyecto para nosotros fue perder años de vida (risas), porque trabajamos hasta las 4 o 5 de la mañana haciendo música en el departamento, inventando ideas, componiendo. 

J: Además encargamos un video hecho con inteligencia artificial, que es el tema central del libro. Nosotros que somos artistas, quizás preferimos que los humanos trabajen, pero en este caso tenía una potencia trabajar con un artista como Victor. Al final igual es mucha la curatoría, por decirlo de alguna forma, la que hace alguien que maneja una IA para producir imágenes. Esto no es apretar un botón e irse a dormir. Hay mucho trabajo artístico detrás de eso. Entonces hicimos «Bahamut», que está también para verse en YouTube. 

A: Sí, porque se justifica mucho escucharlo y verlo, yo creo que es una experiencia. 

De hecho, eso también es una característica, que creo también tiene a Aisles. Siempre han tenido un sentido muy audiovisual, han apostado a eso. Y en ese sentido, estaba dándole vueltas a si tienen proyectos a futuro más de ese tipo. Por ejemplo, el dibujante chileno Félix Vega, hizo cómics para Ayreon y para Camila Moreno. 

J: Sí, de todos modos. Nosotros estamos muy abiertos a todo lo que tenga que ver con audiovisual. Es como parte del interés artístico de la banda, interdisciplinario, por así decirlo. Nos gustan los shows muy escénicos. Nos gusta que hayan historias. Por ejemplo, «Hawaii»  es un disco conceptual que también va para el futuro, va para el pasado. Eso se podría musicalizar en el futuro, podría ser una película, es casi un guion ese disco. Y el futuro va a ser así también, es lo que nos gusta. 

A: Coincidimos perfectamente con Germán y los chicos en que todos estamos de acuerdo en que la música se ve igual. Entonces para nosotros…

J: produce imágenes. 

A: Claro, todo lo que se compone, todo lo que se crea, siempre está proyectado en una imagen. Igual que también tuvo cuando lo hicimos, cuando lo pensamos, cuando se compuso.

Hay una propuesta visual ya creada. 

J: ¿Sabes? Desde el inicio, Álvaro, la gente nos decía que la música de Aisles es como si fuera música para películas. Especialmente las secciones instrumentales.

A: Pero está pensado así, para que la gente lo entienda. No se componen solamente acordes por componer acordes, no se componen secciones por secciones. Es narrativo y siempre está ligado a alguna imagen. Como con Germán, cuando hacemos canciones y con los chicos, hablamos siempre de imágenes. Más allá del acorde y todo lo que produce, es qué es lo que estamos viendo a través de esta canción, de eso se trata. Por eso yo creo que la banda en sí tiene un concepto súper abierto y ligado a lo cinemático, a lo visual, a los colores. Se traduce muy fácilmente. Así que cualquier invitación, estén atentos. 

Los quiero llevar a otro lado. Ustedes hablan de esta cosa como propuesta hacia el futuro de Aisles, pero está también el EP «Obras de Los Jaivas» (2024), que me remite a los mismos Jaivas haciendo «Obras de Violeta Parra» (1984). ¿Cómo calza en esta lógica futurista de Aisles el mirar hacia atrás?

J: Por supuesto. Y parto justamente comentándote que, a propósito de tu relación con «Obras de Violeta Parra», de Los Jaivas, nosotros lo hicimos con esa intención, es un guiño. Que no se lo he dicho nunca a nadie, esta es la primera vez que se lo digo a un medio (risas). Dijimos, pongámosle obras de Los Jaivas, porque ellos homenajearon a Violeta con su “obras”. Así que es información nueva, privilegiada (risas). Lo que pasa es que nunca me acordé como para contarlo, y me han entrevistado un montón por el tema, pero ahora me acordé. Hay un guiño, y claro, lo interesante para nosotros musicalmente, y le paso la palabra a Álvaro, era traer a Los Jaivas a la modernidad, traerlos a nuestra sonoridad, llevarlos al futuro. Cómo sonarían Los Jaivas pasando por este cedazo de nuestra visión de la música, y una cosa un poco más cibernética, un poco más industrial, como, por ejemplo, en «La Conquistada». Entonces fue como jugarnos y llevar su música a lugares que pueden ser incluso hasta incómodos para algunos fans más tradicionales.

A: Es una propuesta arriesgada. Cuando escuchamos las maquetas dijimos, “aquí nos van a amar o nos van a apedrear, o las dos juntas” (risas) Pero a nosotros nos hizo sentido. Si vamos a hacer esto, tenemos que proponer algo artístico. No podemos solamente copiar la canción, no podemos solamente transcribir de alguna u otra forma los instrumentos que se hicieron, la sonoridad. 

J: Nos propusimos no hacer una serie de covers.

A: no son covers, son reversiones, son propuestas artísticas. Es pasar a Los Jaivas de una época, traerlos a la actualidad y, por sobre todo, plasmarle toda la sonoridad de Aisles, toda nuestra propuesta en su música, a través de ellos. ¿Y por qué Los Jaivas? porque es la banda, yo creo más icónica de rock progresivo, debo decirlo, de Chile, de Latinoamérica. Es la banda más importante y más influyente para nosotros como instrumentistas.

J: de los chilenos es la banda que más nos influye. En Latinoamérica hay otras bandas grandes como Seru giran… 

A: Pero como chilenos están en el ADN. Entonces yo creo que era muy importante, muy potente, muy fuerte y arriesgado tratar de hacer esta reversión de grandes clásicos. Pero quisimos asumir riesgos y yo creo que resultó. (risas)

J: Asumimos riesgos. Por ejemplo, el caso de «La Conquistada» la llevamos muy lejos, es como una canción industrial. Cambiamos la cifra de seis octavos a cuatro cuartos, una cosa muy oscura. Y eso nos ganó admiración de algunos, pero también había más de algunos… (risas). Probablemente al mundo Prog, el mundo del Cl.prog justamente le gusten esos riesgos. Pero hay otro mundo un poco más tradicional. Quizás fans de Los Jaivas se asustaron un poco de lo que hicieron con la canción y decían “Esto parece Rammstein”. 

A: De hecho, nosotros pensábamos que los invitados en algún punto nos iban a decir “no loco, ¿cómo se te ocurre que yo voy a cantar en esto?” 

J: Pero había buena respuesta de todos.

A: Si, totalmente. Yo quedé súper sorprendido con Nico Borie, con Jaime (Jaime Sepúlveda, de Kuervos del sur), con Nano (Stern), con Dulce y agraz. Escucharon y dijeron “wow, está maravilloso este proyecto, vamos. Démosle con todo”. Les gustó la propuesta, se atrevieron. Propusieron algunas cosas también que no hay dentro de la producción. Entonces fluyó bastante bien en lo que fue el proyecto de Los Jaivas, y creo que todos salimos muy contentos y tranquilos con los riesgos que tomamos. No es tratar de pasar por encima de ellos. Al contrario, es con un respeto y con un cariño muy grande. Para que alguien no piense que es como una cosa soberbia. 

J: De la forma que lo veía yo, la mejor forma de honrarlos es hacer lo que nosotros haríamos si estas canciones fueran nuestras. ¿Cómo tú le puedes dar más amor al proyecto? Hagamos como si estas composiciones de repente están acá en nuestra disposición. Como idea central, letrísticamente, realísticamente. Y ahí las fuimos amoldando un poquito, modernizando. Algunas las llevamos más lejos. Otras, como el caso de «La Poderosa Muerte», no es que no la hayamos llevado lejos, sino que como ya es un tema bastante progresivo…

A: era difícil hacer más progresiva una canción que ya lo es. 

J: Claro. Obviamente evolucionó la sonoridad. 

A: Tratamos de jugarnos por otro lado, reinterpretar ciertas melodías. Yo reinterpretar también ciertas cosas que hacía la batería, aunque obviamente Gabriel es un referente para los bateristas chilenos. Entonces, tratamos de darle otro enfoque a esa misma propuesta que tenían en esa época, pero con un cariño y admiración tremendo. Yo creo que la gente fue capaz de captarlo, nuestro respeto a través de la música, y por eso yo creo que les gustó más que lo odiaron. O sea, creo que el porcentaje de rechazo fue demasiado mínimo y casi imperceptible. Y la gente lo sigue compartiendo, entonces es una buena señal. 

Aparte de que siempre van a estar las canciones originales, puedes volver finalmente a Los Jaivas si quieres escuchar ese sonido. Para ir cerrando, el próximo 15 de marzo es el CL.prog. 

Cuéntenos un poco de cómo se están preparando para este show, considerando que esta vez le dieron también preponderancia a bandas chilenas, y ustedes, con 20 años a cuesta, son una referencia de la escena prog actual en el país. 

J: Bueno, tenemos un poquito de todo. Tratamos de cubrir varias épocas, por así decirlo. Ya son 20 años de carrera, entonces es difícil cubrirlo todo. Pero hay una parte importante relacionada con «Beyond Drama». Hay algunos temas más antiguos, para conectar con ese fan que nos sigue desde el inicio. Y por supuesto, algo de «Bahamut» y de «Obras de Los Jaivas»  tenía que estar. Eso en general. 

A: Se trató de respetar a todo el fan que sigue en la carrera de Aisles (risas). En el tiempo acotado que tenemos para hacer nuestro show, vamos a tratar de dejarlos a todos lo mayormente contentos que se pueda. Pero más que nada, tratar de conectar con la gente en este año que queremos más que nada tocar. Mostrar este show nuevo que estamos preparando, que estamos montando con nueva música que se va a venir este año. Así que para nosotros es un show muy importante, y estamos muy contentos de que nos hayan invitado. Con grandes bandas, además, referentes del estilo como Leprous, como Textures, como Presto Vivace. Y obviamente nuestros amigos de Delta. Así que nada, súper contentos con la invitación, de verdad. 


Zumbido.cl

0 Comments

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *