Texto por: Ricardo Arriagada Gómez

Fotografías por: Hugo Hinojosa

Tal como se deseaba, se avecinaba con su cartel y lo vivido en el momento, NOES Fest en su segunda edición fue una gran tarde de propuestas que se unieron e hicieron que el sábado 06 de septiembre fuese un lujo estar en Sala Metrónomo. Con bandas nuevas, proyectos de años e invitados internacionales con una combinación de géneros musicales fascinantes, dentro de un ambiente grato sin problemas.

Iniciando a las 17:00 justo y tratando de que todo salga a la perfección, comienza la tarde de música en integridad y calor con el jazz rap, poesía y destreza de Scott y los Pelmazos. A nadie le importó si son corrientes fuera de lo más pesado y crudo, pero esa intención e intensidad estaba puesta con sus letras pero en especial con la química de sus integrantes para darle dinamismo a una gran apertura. «Solange» y «Rema» ya se puede considerar sus clásicos en sus presentaciones por el groove garantizado, incluso en sus momentos más suaves existía un grado de respeto para los curiosos o sus seguidores que los esperaban desde temprano. Están en un gran racha y necesitamos -con urgencia- ese disco debut porque sabemos que la romperá.

El segundo acto estaba en manos de Mala Postura, la más reciente banda formada, y tuvo una importante aparición porque era una fecha especial y eso significaba dos cosas que fueron cumplidas: presentar el flamante material completo, el EP «MP» formado con cinco temas, y las restantes para probar cosas nuevas. Fue genial presenciar que muchas personas tienen en su radar al cuarteto, con un cálido recibimiento y entusiastas a que vayan escalando con su propuesta Emo-pop / Post-hardcore que tiene un potencial inmenso y fue demostrado a la altura.

Cerca de las 18:20 como aparecía en sus itinerario, era el turno de Chances, responsables detrás de la producción del evento y ofrecer algo más al ser los únicos que han repetido plato luego de la primera edición del año pasado. Y cumplieron con creces con un show totalmente sólido, porque existía confianza y fue preciso en todo el sonido pesado, además de que el factor de conexión con el público lo hiciera disfrutable. Hubo temas de su disco Homónimo de 2023, adelantos exclusivos de lo que se viene a futuro -con canciones que tiene más melodías y son esenciales en el metal alternativo / metalcore como vienen explorando- y más, dando una de sus mejores tocatas dentro de los que hemos cubierto. Un momento destacable fue la muestra de «Druidas» que cuenta con la participación de Gastón Prado de Joliette… ¡y era la oportunidad para hacerlo!

Avanzando y cerca de la mitad de esta jornada impecable, los primeros invitados internacionales a salir a escena fueron los argentinos Vientos cuya presencia fue parte de los puntos culmines, desde la gratitud en tocar cruzado la cordillera solo para este evento, con el quinteto sonando tal cual en los tiempos del lanzamiento de “Todos los momentos incendiarios” (2015) -interpretando casi el disco completo- y lo más reciente que es el single “Nuevamente Otoño & Para Siempre”. El espectáculo fue total crédito a su vocalista Adrian Pivetta por la energía, preocupación de que toda la gente se sintiera parte del repertorio, y sus palabras referente a lo lindo que es la autogestión, apoyo mutuo entre colegas y su repudio frente al actual gobierno argentino, que ha impulso para que toda esa rabia se sintiera. Tremendo.

En este punto, viene la sección más interesante del NOES Fest debido a la variedad que han querido demostrar para la gente, y fue encaminado con la oscuridad de Ater. Pese a ocupar tiempo en el montaje, todo era necesario para que la iluminación, atractivos instrumentos y atuendos sea todo al pie de la letra con la estética de la banda. Mostrando canciones del «Somber» (2024), el sencillo «The Fall» y un par de composiciones nuevas, fue un show que tuvo muchas reacciones diferentes: gente hipnotizada, procesando todo lo que ocurría y algunos poseídos con la música con toda la métrica del black metal y Thall, con sus cambios de asignatura y tiempos impredecibles, lo que hizo Ater llega a ser inexplicable, pero de que estuvo bueno… estuvo muuuuy bueno, incluyendo las canciones inéditas.

Para darle mayor picardía y variedad, ya siendo de noche en un sábado distinto por las vísperas al cambio de hora, llega la agrupación Tortuganónima para una presentación más enfocada en las emociones, en un entretenido encuentro de sonidos math / post-rock que igual mostró a las personas elogiando este viaje que pasó por los discos «Pársec» (2015) e «Imago (2019), uno de sus singles más recientes «Nos Siguen las Grietas» y track nunca antes mostrados, llamando la atención porque, siendo una banda de gran presencia instrumental, habrá creaciones con líricas y eso sube la ilusión ante un LP que, esperamos que llegue lo más pronto posible. La vara no podía caer, y lo que hicieron fue magistral.

Como mención no tan ajena, es relevante destacar la buena cantidad de merch presente con las bandas participantes, la preocupación de producción para quienes necesitaban tapones de oído en caso de que el volumen sobrepasara sus expectativas, y también con ser clave en ser un encuentro para amantes de la música, con una divertida cortina entre presentaciones sonando temas de pop, trip hop, y en el final con cosas entre cumbia, cueca -hasta Luis Jara se metió- para despejarse un rato y luego expulsar toda la energía para el cierre.

Es así, que el término del evento estuviera a cargo de los invitados estelares Joliette, desde México descendiendo con su gira actual en Sudamérica para tener unos días completos disfrutando en Chile. Toda su potencia se hizo notar con lo genial que suenan cada uno, desde los gritos hasta las cuerdas que no paraban de crear ese post-hardcore / screamo sobresaliente. Celebrando con su disco «Pérdidas variables» de este año, fue la prioridad para esta presentación en su tercera visita al país, prendiendo al público desde los que estaban en barricada, en el centro donde había un enorme círculo que no paraba, y la gente en los costados atrapados en todo lo que pasaba por sus ojos. Cerca de una hora llena de brutalidad.

NOES Fest en su segunda edición fue un total éxito, grandioso por la apuesta en muchos grupos que tienen su mensaje y sonido, y no se sintió nada fuera de sintonía. Los caminos independientes se encontraron para un sendero enorme que se transformó en la muestra de solidez que existe en nuestro país, y lo que se puede encontrar en otros rincones de Latinoamérica con la entrega que dan el mismo pueblo.

Puedes revisar nuestra galería fotográfica de este evento aquí


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