Texto por: Ricardo Arredondo
Fotografías: Hugo Hinojosa
Ya al llegar al Teatro Caupolicán se sentía la vibra en el ambiente. Grupos de gente compartiendo una cerveza en la previa de lo que prometía ser una jornada demoledora, y que para sorpresa de nadie, no defraudó. El evento era el retorno a tierras nacionales de Lamb of God quien traía consigo un invitado de lujo, los australianos Parkway Drive.
Pocos minutos antes del horario anunciado, hace su ingreso Parkway Drive en escena. Las luces enceguecen a los asistentes, y entremedio emerge la figura de Winston, el gran frontman de la banda para dar inicio con «Glitch» de su último disco «Darker Still». Desde el segundo uno fueron una potente embestida que te tomó y no te soltó durante los cerca de 60 minutos que duró su set. Continuaron con «Pray» y «Carrion» en lo que fue una batería de hits de diferentes momentos de su discografía. El público respondió de maravilla cantando a todo pulmón demostrando la popularidad de los australianos, y probando que tienen credenciales de sobra para encabezar un show en solitario en nuestro país.
Siguieron sonando «The Void», «Soul Bleach» y «Vice Grip» de su disco «Ire (2015) con una audiencia incansable que giraba sin parar en el gran circle pit que se formó en la cancha de un Caupolicán que estaba en un 80% de su capacidad. Entre canciones, el público coreaba el «woohoo» de «Wild Eyes», y Winston con una sonrisa en su rostro decía «calma, aún no«. Continuaron con canciones que recorrieron gran parte de su discografía en un show que tuvo un sonido espectacular, un juego de luces que hizo alucinar a sus fanáticos y que no dejó indiferente a nadie. Con un show en vivo muy potente, demostraron por qué son una banda tan cotizada y que se presenta de forma continua en los festivales de Rock más grandes del mundo. Su calidad quedó demostrada.
La banda lo dio todo, al igual que el público y quiso despedir el show saciando la sed de sus fanáticos. Sonaron los acordes de «Wild Eyes» y la locura fue total. La gente cantó, saltó, cabeceó y armó circle pits descontrolados en lo que fue una gran presentación de los australianos. Esperamos que vuelvan pronto en un show en solitario y de mayor duración.
Luego de un breve descanso, marcado por el paso de gente desde platea hacia la cancha -recordemos que la localidad de cancha estaba agotada hace meses, y se preveía el ambiente que se viviría ahí pronto- fue poco lo que alcanzamos a recuperarnos para recibir el siguiente mazazo que nos dejó knock out. Suena la intro de «Memento Mori» y sabemos que estamos destinados a sumergirnos en la violencia y poderío de Lamb of God. Y así fue. Entra toda la banda y la potencia se hace notar de inmediato. Randy, locura. No hay otra palabra para definir su performance. Sin descanso combinan hacia «Run» y de inmediato hacia el himno «Walk With Me In Hell» que es cantado por todos los asistentes.
Randy saluda al público, pero el descanso es breve. Es sólo un momento para volver a golpear con «Resurrection Man» y luego con «Ditch» de su último disco «Omens» (2022). Aunque la lógica es que el set hubiese estado cargado hacia su último trabajo discográfico, sólo hubo dos canciones de ese disco, y en general el concierto contó con canciones de gran parte de su catálogo, lo que siempre se agradece. Los cabezazos se intensificaron cuando sonó la intro de «Now You’ve Got Something To Die For» del mítico álbum «Ashes of the Wake» (2004) -¡Wow! ¡Ya son casi 20 años!-. La presentación completa es una exhibición de calidad y perfección. Lo de Lamb of God no tiene nombre. Se ve con claridad por qué son una de las piezas claves del Metal moderno y por qué llenan donde sea que vayan. Campbell, Demmel -guitarrista de Machine Head quien vino en reemplazo de Willie Adler- y Morton tocan con una tranquilidad que irradia. Se puede sentir su oficio y que están ahí tocando complejos riffs como si nada, preocupados sólo de disfrutar y de conectar con el público.
Luego de algunas canciones siguieron con «Omens» y con un público que no paraba de hacer circle pits, llegando incluso a uno que ocupó prácticamente toda la cancha del Teatro Caupolicán. Una auténtica locura y descontrol masivo fue lo que se vivió y se sintió anoche, en donde volaron vasos y botellas -ambos de plástico-, voló ropa, gorros e incluso algunas zapatillas. Una fiesta total. Siguieron con «11th Hour» y «512» del «VII: Sturm und Drang» con un Randy que pasó de la voz hablada a la gutural con maestría mientras subía y bajaba de su plataforma con sus dreadlocks al viento.
El set terminó con dos verdaderos himnos. Uno tras otro, para desatar la fiesta. Primero fue «Laid to Rest» que fue una demostración de calidad musical por parte de toda la banda, con Art Cruz tocando a la perfección, mientras los riffs daban los clásicos armónicos que le dan ese sello a la mítica banda. El ambiente es de celebración con un público en el que parece que la palabra descanso no figura en sus diccionarios. La guinda de la torta la ponen con «Redneck» con todo el público gritando «This is a motherfuckin’ invitation» para sellar en alto lo que es uno de los pasos más brutales de la banda por Santiago. Un show de alrededor de 75 minutos que no dio descanso y que nos permitió ver a Randy y compañía en esplendor durante una liturgia de música, fuerza y un poderío digno de las grandes ligas.
La jornada de anoche en el recinto de San Diego fue de otro planeta. Las dos bandas estuvieron a la altura y brindaron un espectáculo increíble. Un punto a destacar, sin duda alguna, fue la técnica. El sonido fue brutal y demoledor, pero sin perder calidad y claridad, y las luces, es lo que todos esperamos para un show de ese calibre. Una noche de oscuridad y brutalidad únicas en su tipo. Cada banda en su estilo, con sus similitudes y diferencias, pero sobre todo por su calidad, hacen de este show, una de las mejores jornadas que ha tenido el metal en lo que va de 2023.
Setlist Lamb of God:
01. Memento Mori
02. Ruin
03. Walk With Me in Hell
04. Resurrection Man
05. Ditch
06. Now You’ve Got Something to Die For
07. Contractor
08. Omerta
09. Set to Fail
10. Omens
11. 11th Hour
12. 512
13. Vigil
14. Laid to Rest
15. Redneck
Setlist Parkway Drive:
01. Glitch
02. Prey
03. Carrion
04. The Void
05. Soul Bleach
06. Vice Grip
07. Dedicated
08. Karma
09. Bottom Feeder
10. Crushed
11. Wild Eyes
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