
Texto por Tomás Bascoli
Ante el inminente fin de la mudez performativa de Tenemos Explosivos -quienes estarán el próximo 5 de septiembre presentándose ante una Sala Metrónomo llena-, vale la pena comenzar a prepararse y a estudiar la profunda y rica producción musical de Eduardo Pavez, Juan José Sánchez, René Sánchez, Álvaro Urrea y Matías Acuña.
Con apenas cuatro álbumes de larga duración en 10 años, el quinteto de post hardcore ha optado siempre por un proyecto conceptual y complejo de sus producciones que han convertido sus canciones en un caleidoscopio de historias enmarcadas en la rabia y una realidad propia de nuestra identidad como sociedad chilena que a veces nos cuesta mirar de frente. Por ello, cuán importante es la propuesta de Tenemos Explosivos que nos ayuda a canalizar y recordar aquellas temáticas complicadas de nuestra vida en sociedad.

Así, y para tener la cabeza fresca de muchas referencias que han construido la carrera sonora del quinteto, en Zumbido proponemos cinco canciones para comprender e interiorizarse con Tenemos Explosivos previo a un show que apunta a ser legendario.
Incluido en su última placa, “Cortacalles” (2022), “San Borja” es un grito a la memoria que se va desgarrando por medio de la combinatoria bajo, batería y guitarra que explotan cuando Eduardo Pavez canta ¿o acaso ya no me querí? Una bella canción de horror que nos recuerda que Tenemos Explosivos no es cuidadoso al momento de enfrentar las temáticas que quiere contarnos. Entre pausas melódicas que sirven para entender de lo que se trata la canción y brutalidades sonoras que llegan como un golpe seco al alma, embellecidas por vientos y coros, “San Borja” es una de las mejores canciones de la banda y que se seguro será un momento idílico en su próxima presentación.
Con una apertura por medio de un discurso grabado de Julio Anguita, que se acrecienta con la inclusión de la banda, “La Libertad Absoluta Y El Terror” de su álbum “Victoria” (2017) se erige como una de las clásicas canciones de la banda. La combinatoria entre profundidad, explosión y una lírica entre cantada y relatada, que cuenta con momentos que Pavez simplemente nos habla directo en la cara, producen un sonido inigualable y una experiencia sonora sin otro en el espectro musical chileno. Sin dejar de lado las temáticas rabiosas, esta canción aparece como aquellas que marcaron el sello de la banda.
La canción que da inicio a su primer álbum de estudio, “Derrumbe Y Destrucción” (2012), es una carta de amor a todo aquello que Tenemos Explosivos quiere llegar a ser. Siendo el primer corte de su historia, “El Mejor Jugador Del Fuego” nos entrega a la banda desplegada en una interpretación aguda, si bien no tan pesada como en otros discos, pero aún con un discurso claro de cómo querer sonar. Con la temática de la destrucción y el fuego como eje central, esta canción aparece como la primogénita de una serie de ladrillos en los cuales construyó su proyecto la banda. Melodía y lírica picante, incómoda y asombrosa.
Perteneciente a su segundo álbum, “La Virgen De Los Mataderos” (2015), “Montreal, 400 Negativos” aparece como una ligera canción dentro de la colección de Tenemos Explosivos. Mucho más melódica que otras y alejándose de la pesadez gravitante de otras producciones, el tema imprime directo la desgarradora historia de Rodrigo Rojas de Negri y Carmen Gloria Quintana, lamentables protagonistas del Caso Quemados en plena dictadura chilena. Así, “Montreal, 400 Negativos” se presente, junto al resto disco, como un logro de Tenemos Explosivos por salir del under y colocarse en un espectro más amplio de oyentes y escenarios, pero sin perder de foco sobre lo que desean cantar: acá no hay canciones bonitas, hay canciones valientes y esta es una de ellas.
También perteneciente a “Cortacalles” (2022), “Lautaro, La Brigada” es otra de las canciones fundamentales de Tenemos Explosivos. Con una rigurosidad sonora que destaca por la batería de Matías Acuña y el bajo de Álvaro Urrea, en complemento con Pavez que nos desgarra el alma cuanto nos canta arma armaduras para protegerte, este tema también cuenta con una sección cargada de vientos que también permite ampliar el rango y la frecuencia de la banda, como el cierre con una grabación que recuerda lo conceptual de este proyecto. Una canción ambiciosa, compleja, oscura, esperanzadora y terrible, un sinfín de emociones incómodas y valientes que “Lautaro, La Brigada” se encarga de hacer penetrar en nuestra piel sin preguntarnos.
Estas canciones, y muchas más, serán parte fundamental de un show que promete, y mucho. Este próximo 5 de septiembre tenemos una cita con la historia orquestada por Tenemos Explosivos, y a sala llena. Un espectáculo que va más allá de la música y las canciones y se erige como un verdadero acto de recordar, un ataque al olvido y un abrazo, aunque duela, a todas y todos quienes ya no están con nosotros contra su voluntad. Porque… con la porfía de la memoria por delante.
Tenemos Explosivos en Sala Metrónomo.
5 de septiembre.
Produce Transistor.





















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