Por: Lucas Araya, Tomás Bascoli C. y Ricardo Arriagada Gómez
Santiago Motorizado
El show de El Chango abrió la segunda jornada con una solida presentación que abrió con una honesta versión de «Soy Rebelde» de Jeanette, acompañado solamente de un teclado para saludar a la masa que se iba congregando a eso de las 14:30. Luego de esta obertura intimista, Santiago Motorizado descargó una selección de canciones de la banda sonora de la gran serie «Okupas» (2000), combinadas con temas de otras bandas emblemáticas de la escena indie argentina (107 Faunos, Las Ligas Menores) matizadas con canciones de Él Mató -precisamente «Johnny B» y «La noche eterna»– donde su Stratocaster blanca y la voz del público eran los únicos (y geniales) acompañamientos. Una sesión ecléctica y emotiva, donde las descargas sónicas convivieron con el Folklore, el Tango, la balada latinoamericana y la Cumbia. El soundtrack de un continente y una generación regional. Para cerrar «El Tesoro». Una joya de show hasta el final, el final.
The Ganjas
Las olas del océano sónico de los Ganjas llegaron a la playa del Primavera Sound con una descarga de Dub y lisergia elevando la tarde entre ecos, densas líneas de bajo, guitarras expandiéndose en ecos y reverberaciones y el humo que cubría loa rincones. Otra maciza sesión de sicodelia ganjesca.
Congelador
Un trance disruptivo y disonante que destroza, derritiendo cualquier frontera del encasillamiento. Con un set cargado de fuerza y de potentes sonidos orgánicos en colisión constante con ruidos electrónicos, formando una lucha de titanes que bailan a todo volumen. Hubo espacio también para atmósferas más cadenciosas con Lore de Chica Rica en las voces y secuencias intrigantes jugando con melodías dulces ocultas entre la maleza del potente sonido de Congelador en vivo que se expandía desde el Escenario Primavera hasta la más estruendosa distancia.
Japanese Breakfast
Michelle Zauner junto con su banda quedaron fascinados por el recibimiento que hubo con su previa en Club Blondie, y acá cumplió su misión de encantar a sus seguidores (y nuevos que se identificaron en sentirse atraídos con sus canciones) en un fresca y redonda presentación. Ánimos diversos como la bailable «Be Sweet», su aventura virtual con «Boyish», la sofisticada «Posing in Bondage», la maravillosa «Slide Tackle» y más que demostraron en esas presentaciones joyitas que uno se topa o esperaba por mucho tiempo.
Los Jaivas
La emblemática banda chilena dejó hizo valer el peso de la historia con el sonido tremendo de una vida mágica en una presentación rebelde y digna para un festival masivo. Un repertorio que repasó notables momentos de su discografía más íntima, abriendo la senda con «Tarka y ocarina» con un despliegue instrumental que subió a las alturas más increíbles de toda la jornada. «Mira niñita», «Guajira cósmica» y «La conquistada» demostraron porqué siguen siendo una de las agrupaciones más importantes de nuestra historia, recibiendo el cariño y el aplauso sincero y entregado de un público ya altamente multitudinario.
La emoción se podía sentir en el aire, especialmente al escuchar las palabras del gran Mario Mutis para anunciar la celebración de los 60 años de la banda y agradecer el apoyo constante de la gente y todas sus muestras de amor, incluso en los momentos más oscuros y triste de la carrera de Los Jaivas. Como regalo y para coronar la presentación, una ejecución magnífica de «Corre que te pillo» cerró un show fino y de altísima calidad musical y humana. Larga vida a l@s mejores, también conocidos como Los Jaivas.
Interpol
Promediaba la media tarde en el Parque Bicentenario de Cerrillos e Interpol saltaba al escenario para brindar un show sobrio y lleno de clase. Los estadounidenses encantaron al público por medio de sus clásicos sencillos a través de un espectáculo sin grandes sobresaltos y con un sonido caracterizado por la voz de Paul Banks, quien mantuvo a los asistentes coreando las canciones de principio a fin, como «Evil», «Obstacle 1», «Passenger», «Rest My Chemistry» y «Slow Hands».
Phoebe Bridgers
La deuda de su baja en el último Lollapalooza ya fue pagada con la maravillosa presencia de Bridgers por fin en suelo chileno. Pese a su curiosa forma de presentarse con su nombre en tipografía como banda de Black Metal, es en realidad un conjunto de emociones que fue llevada por su voz impecable y cientos de fanáticos atrapados en canciones como «Kyoto», «Scott Street» o «Moon Song», Varias canciones contaban con bonitas visuales que relataban una historia, mientras se presenciaba el atardecer con algo de sol y que dejó un detalle especial aparte. Conectando con el público, contando su emoción de conocer esta parte del mundo y cerrar de manera épica con «I Know the End», dejó claro por qué era uno de los números fundamentales de la jornada.
Lorde
La lluvia amenazaba el lugar y los diversos relámpagos solo sirvieron para embellecer una de las postales imborrables de la noche. La cantante Lorde, completamente empapada en gran parte del espectáculo, brindó un show sólido y artísticamente atractivo con un escenario que mantenía una escalera giratoria en el medio. La neozelandesa no tuvo compasión en entregar sus mejores y más clásicos sencillos junto a su nuevo material, como «Homemade Dynamite», «Ribs», «Mood Ring», «Liability», «Royals», «Green Light» y «Solar Power», por mencionar algunas. Ya con el público completamente mojado, Lorde agradeció el despliegue y la resistencia de éstos, junto con entregar un emocionante mensaje de su segunda vez en Chile. Así, se forjó la gesta de Lorde en el Primavera Sound 2022.
JPEGMAFIA
Mientras se intercalaba los artistas masivos en los principales sitios, en el Escenario Pepsi ocurrió un terremoto llamado Peggy. Con un conteo aproximado de 150 personas solamente, la potencia que formó JPEGMAFIA fue tan impactante como decenas de estadios llenos. Un popurrí de hits, covers, momentos intensos y algunas bromas, fue sin dudas de esos shows que tomarán un punto importante de ser el favorito, ya que esa fuerza de sus Hip Hop Experimental / Industrial hizo desaparecer la preocupación por la lluvia. La cantidad de pogos formados en este alocado setlist fue impresionante.
Arca
Alejandra Ghersi no se hizo problemas con humor, carisma y mucha perfomance de sellar la segunda noche con una especie de DJ Set donde la primera parte fue un viaje extravagante de sus diferentes influencias para su música, desde canciones de Drum & Bass, IDM, Deconstructed Club hasta parte de sus raíces latinas como Merengue o Tuki, se puede nombrar a El Alfa o Aphex Twin como ejemplos de esta selección aleatoria pero soberbia. Con una actitud de locura con esos beats imbatibles, la venezolana tuvo el mismo equilibrio de excitación y energía de los asistentes que dio paso a la segunda parte, lleno de himnos actuales de Neoperreo como son sus tracks «Prada», «Rakata», «KLK» o «El Alma que te trajo» de su última colaboración con SAFETY TRANCE. Existió una vibra tan poderosa que se salió un poco de su tiempo, resolviéndolo de manera inteligente y divertida para concluir esta noche de miles de sensaciones. Excelente show.
Arctic Monkeys
Dejando atrás la lluvia, el segundo día del Primavera Sound cerró con broche de oro gracias a la presentación de los británicos. Alex Turner y compañía, con nuevo álbum bajo el brazo, brindaron un show que rozó la perfección y que encantó a la gran masa de público que aguantó hasta las 10:30 de la noche, hora en que comenzó la presentación. Con un setlist cargado de sus mejores canciones y que transitó por todos sus álbumes, los Arctic Monkeys demostraron su evolución y madurez junto a un show estéticamente sobrio y lleno de tonos sepia. Así, y más cariñoso que de costumbre con el público, Turner desplegó una clase de liderazgo escénico que mantuvo a los asistentes coreando para capear el frío gracias al Rock británico de una de las bandas más importantes del siglo XXI, por medio de altos pasajes musicales como «Brainstorm», «Cornerstore», «Do I Wanna Know?», «Teddy Picker», «Body Paint» y «I Bet You Look Good On The Dancefloor». Para terminar magistralmente con «R U Mine?».
0 Comments