Álbum: “Pressure Machine”
Artista: The Killers
Año: 2021
Por: Tomás Bascoli C.
Dentro de las muchas consecuencias que nos ha dejado este mundo pandémico, el contar con tiempo suficiente ha sido una de ellas y muchos de nosotros lo aprovechamos para pasar horas y horas de reflexión y retrospección interna. Tal caso, parece que fue el detonante para que Brandon Flowers y compañía se decidiera a grabar y publicar “Pressure Machine”.
Lejos de la parafernalia y el sonido pomposo que hizo famoso a The Killers, este álbum viene a tomar el puesto de una banda madura que no tiene temor en desacelerar el ritmo, despojarse de sonidos eléctricos y acercarse mucho más a figuras como Bruce Springsteen.
“Pressure Machine” fácilmente podría catalogarse como el lado más oscuro de “Sam´s Town” (2006) o una reversión del sombrío “Wonderful Wonderful” (2017). La estética desértica, la voz calmada y emocional de Flowers y los recurrentes pasajes y referencias a la infancia de él, son los principales ejes de este nuevo álbum. Durante las 11 canciones que componen el trabajo, The Killers nos presenta la otra cara de la frivolidad e instantaneidad de Las Vegas, en donde ahora abundan paisajes serenos y llenos de nostalgia.
En términos de sonido, el alejamiento de las raíces musicales del grupo es identificables a miles de kilómetros. Con su trabajo anterior, “Imploding The Mirage” (2020), The Killers ya se encontraba en una etapa en la cual dejó de lado el glamour y los trajes emplumados llenos de escarcha, para ahora encontrase como un grupo con bastante recorrido y experiencia que plasma por medio de un sonido profundo y a veces aletargado, los recuerdos de sus vidas en aquella ciudad estadounidense, por el cual funciona mejor el protagonismo de capas musicales produciendo paisajes sonoros como una muralla y acercándose a géneros como el country y el folk.
En varios pasajes del álbum uno se puede comenzar a imaginar que Flowers nos está contando una historia acompañada orquestalmente del resto de la banda. Llevado al extremo, el mejor ejemplo de aquello es la decisión de incorporar entremedio de la mayoría de los temas diferentes grabaciones y voces en donde cada una de ellas nos relata una especie de micro cuento, lo que podemos leer como el intento de convertir el álbum en una máquina del tiempo.
Así, “Pressure Machine” viene a entregar un trabajo muy personal del grupo, en donde destaca la voz como guía magistral y el retorno de Dave Keuning a la agrupación prefiriendo sonidos más cerca de lo acústico que lo eléctrico y lo sintetizado. El álbum es la culminación implosiva de aquellos temas que se encuentran en otros álbumes de la banda, en donde el sonido vertiginoso de Las Vegas se pierde para dar paso a un ritmo tranquilo, complementado con la voz de Flowers relatando experiencias infantiles y el resto de la banda que sabe perfectamente qué hacer y cómo hacerlo, para mantener un ritmo que ayuda a que cada canción tenga momentos de euforia y alegría máximo, como de introspección y recuerdos.
¿Qué escuchar? “West Hills”, “Quiet Town”, “Sleepwalker”, “In The Car Outside” e “In Another Life”
Lista de canciones:
- “West Hills”
- “Quiet Town”
- “Terrible Thing”
- “Cody”
- “Sleepwalker”
- “Runaway Horses” (ft. Phoebe Bridgers)
- “In The Car Outside”
- “In Another Life”
- “Desperate Things”
- “Pressure Machine”
- “The Getting By”
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