Texto por: Ricardo Arriagada Gómez

Fotografías por: Joselyn Heyden

Estamos cerca de la mitad del año y hemos disfrutado de todo, desde eventos explosivos hasta estrellas que tuvieron un triunfal regreso después de años. La noche del martes 04 de junio fue el turno de Norah Jones, luego de casi seis años de su anterior visita. Una elegante velada que tuvo la presencia nacional de Montse, siendo su segunda vez como acto previo en el Movistar Arena, esta vez presentando temas de su debut “Mirando el Horizonte”.

Esta gira viene de la mano con el lanzamiento de su más reciente LP “Visions” (2024), que ha tenido un gran recibimiento y se ha transforma en el trabajo más aclamado de su última etapa. Esta faceta se ha llevado al show en vivo que toma un concepto simple, y que el uso de colores es sofisticado y muy agradable para la vista, como un plus a tono de cada canción. Pese a que mucha gente ingresó a la hora de la partida, lo que ocasionó un retraso general, cerca de las 21:15 comienza el show con “What Am I to You?” para ya entrar en confianza, en un setlist muy cargado a los temas nuevos, siendo “Paradise” y “Running” las primeras escogidas, recibidas con mucho amor y entusiasmo por sus seguidores.

Obviamente, los clásicos tendrían su espacio. Al son de “Sunrise” en una versión más cercana a su actual era de pop soul que une su jazz pop maravilloso, pasando por otros temas con años en el cuerpo como “After the Fall”. Norah interpretó estos temas en piano con una calidad envidiable, voz intacta y un sonido en general estupendo.Pasó al Wulitzer para cantar “I’m Awake” y “I Just Wanna Dance”, para después regresar al piano con “Hurts to Be Alone”. Su banda soporte era un pilar fundamental, un quinteto en vivo que fácilmente podría ser la banda más efectiva del mundo, especialmente con la soberbia entre batería y las capas que lograba hacer los teclados / órganos.

Jones agradece el aprecio y el cariño, con asistentes que tuvo un comportamiento muy respetuoso, incluso con pocas presencias de celulares a excepción de algunos momentos especiales. Toma posición al centro del escenario para usar la guitarra en una seguidilla de temas que iba con el Homónimo de su último álbum, “Staring at the Wall” hasta rematar con “Queen of the Sea” que fue uno de los buenos puntos por su química. Una de sus piezas más queridas, “Come Away With Me” y “Happy Pills” sirvieron para aterrizar de nuevo a los recuerdos, estando en medio de sus composiciones recientes, terminando la primera parte con “All This Time” y “That’s Life”.

El Encore fue muy breve, ni dos minutos de descanso para volver a su piano y tocar una serie de covers que sirviendo para su éxito temprano. “Turn Me On” contó con la participación del público encendiendo las luces de sus celulares para formar un mar luminoso, que siempre suele ser un bello momento dentro de la gran cúpula. Junto con “Long Way Home” de su segundo disco «Feels Like Home» (2004) y el broche de oro con la joya de impulsó su carrera, “Don’t Know Why” era lo adecuado para un recital completamente redondo entre la cantautora y sus “ángeles”, como apodó a sus compañeras y compañeros de banda.

Siendo su quinta ocasión visitando nuestro país, con una hora y cuarenta minutos de show, Norah Jones marca un regreso de espontaneidad impecable, y que esos colores entre las telas, su vestimenta y las luces de apoyo, fueron las pinceladas de una velada fina y notable.

Setlist:

01. What Am I to You?

02. Paradise

03. Running

04. Sunrise

05. After the Fall

06. I’m Awake

07. I Just Wanna Dance

08. Hurts to Be Alone

09. Visions

10. Little Broken Hearts

11. Staring at the Wall

12. Queen of the Sea

13. Come Away With Me

14. Happy Pills

15. All This Time

16. That’s Life

-Encore-

16. Turn Me On

17. Long Way Home

18. Don’t Know Why

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