Texto por: Ricardo Arredondo
Fotografías por: Daniel Sáez
El frío del otoño se empieza a sentir, y las calles están casi vacías. Es viernes santo en la ciudad, pero en el Teatro Teletón en el centro de la ciudad la sensación es diferente. Luego de 7 años, vuelve a nuestro país la banda Pierce The Veil en una jornada que ya desde fuera del teatro con una larga fila se puede prever que será épica.
Los encargados de abrir el show fueron los nacionales Killa Reviver quienes fueron elegidos a través de votación popular. Una iniciativa que puede tener adeptos y detractores, pero que al final tiene algunos puntos que sin duda son positivos: la posibilidad de darle espacio a bandas que quizás no están en el radar, y permitir que los mismos asistentes sean quienes elijan la banda de soporte, lo que hará del evento, una mejor experiencia para los fanáticos.
Los nacionales derrocharon energía. Se nota en su expresión las ganas, el ímpetu y la felicidad por ser parte de una jornada como esta y esto se traduce en la fuerza que expresaron en el escenario. Con sonidos que nos recordaron a bandas como Linkin Park o los últimos sencillos de Bring Me The Horizon, hicieron saltar a un público que los recibió de gran manera y que ya repletaban el Teatro Teletón. En un set de alrededor de media hora, interpretaron canciones de su reciente disco «Season One» con canciones como «Empire», «Collision» y «Legado». Un punto a destacar, es lo poco común de ver una voz femenina en frente. Tim pasa de voces melódicas a gritos desgarrados y le da una puesta en escena y vibra diferente a lo que solemos ver. Se agradece mucho ver presencia femenina, en un mar donde habitan mayoritariamente hombres. Una banda que seguro no hará más que seguir creciendo y sorprendiéndonos en el futuro…
A las 20:30 en punto suena «El Rey» de Vicente Fernández. La banda no deja sus raíces. Recordemos que aunque son nacidos y criados en Estados Unidos, vienen de familia mexicana. La gente enloquece y todo el teatro corea «lloraaaaaar y llorar». Entra a escena Vic y compañía y de inmediato dan el primer golpe con «Death of an Executioner», la canción que abre su último disco -y que da nombre al tour- «The Jaws of Life». No hay descanso, y de inmediato continúan con «Caraphernelia» donde sus fanáticos saltan y cantan sin parar. Esto sería la tónica de todo el show. Una fanaticada totalmente entregada, que disfruta de la música, canta y salta sin parar. El set intercala entre canciones de su último disco -como «Pass the Nirvana» y «Emergency Contact»– y canciones antiguas -como Bulls in the Bronx» y «Stained Glass Eyes and Colorful Tears»– que tienen 10 o más años. El tiempo pareciera no pasar. El público ya no es quinceañero, pero la energía y el amor por Pierce The Veil pareciera estar intacto.
La banda navega entre diferentes estilos. Aunque podríamos definirla como una banda más de Rock Alternativo, tiene momentos que se acercan mucho hacia el Pop Punk, a ratos un Punk Melódico e incluso con algunos momentos que se acercan más hacia el Post Hardcore.
En la mitad del set, vino un momento de intimidad en donde Vic se queda solo en escena, y sentado con una guitarra acústica interpreta «Bulletproof Love». El teatro se convierte en una fogata comandada por el frontman y seguida a coro por todos los asistentes.
Luego de ese momento, vuelven los demás integrantes a escena para tocar «Disasterology» y de inmediato armar una fiesta con «Circles» que fue un alto momento del show. Javier es un show aparte. Da vueltas, canta, se tira sobre el público. Les habla y les da uñetas durante todo el espectáculo. Una entrega digna de imitar la del bajista.
Seguida al éxito del «Missadventures», siguió otro momento icónico del show. La banda interpretó «Hold On Till May» y en mitad de la canción subió a Chris al escenario, y Vic le cantó tomándole su mano. Este momento fue de emoción total. Pudimos ver a varios fanáticos llorar mientras cantaban a todo pulmón en un momento que será memorable para todos los asistentes, y sobre todo para la favorita de Dios: Chris.
La primera parte del set finalizó con «A Match into Water» de su disco más famoso «Collide With The Sky» con una banda despidiéndose rápidamente y un público que pedía más.
No tardaron muchos minutos para volver a cantar «Dive In», la canción que da el puntapié a su penúltimo disco. De inmediato dan paso a su mega éxito «King for a Day», que fue una aplanadora. Cantada por todo el Teletón y con un breakdown que hizo saltar a todos mientras éramos bañados por un show de luces y confeti. Un final épico de una banda que dio un gran espectáculo y un público que supo estar a la altura.
A modo general, fue una gran jornada en todo aspecto. Desde el lugar elegido, la convocatoria, el comportamiento del público, la producción y sobre todo el show entregado por Pierce The Veil, quienes después de 7 años vuelven para demostrar que tienen una gran fanaticada en nuestro país que creció con su música y que los tendrá siempre en el corazón. Los fanáticos ya lo tenían claro y ahora nosotros lo confirmamos: La música trasciende. Y la música con la que creces llega para quedarse para siempre. No, mamá. No era sólo una etapa…
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