Molchat Doma en Teatro Caupolicán: El frío se hace presente

Por: Boris Figueroa

El otoño llego a Santiago y el frío no se hace esperar, hoy toca Molchat Doma y los encargados de abrir esta cita con el post-punk son los locales de Friolento, directamente de Concepción llegan para encender la fiesta con su retro pop, haciendo bailar al público, el cual coreaba los temas de su álbum del 2020, Disco Invierno.

Pero la cosa se calentó de verdad cuando Friolento tocó los éxitos del reggaetón en clave post-punk, temas como «Bichota», «La Santa» y «Candy», fueron los fuegos preliminares para lo que nos depara la noche, con un sonido contundente y una puesta en escena de buen nivel, Friolento se despide entre aplausos. Demostrando por que fueron la banda escogida para abrir el show de Molchat Doma en un Caupolicán vestido de negro. 

Se apagan las luces y entran en escena Roman Komogortsev a cargo de la guitarra & teclados y Pavel Kozlov a cargo del bajo & teclados. Tras un azul profundo y frío se hace presente Egor Shkutko a cargo de las voces.

Entre ovaciones del público, dan cuenta de como este trío se ha posicionado como la banda de post-punk de los últimos tiempos.

Con los dos primeros temas “Клетка” y “Звезды”, Molchat Doma derrumba el Caupolicán, haciéndolos saltar y bailar. Hits tras Hits la banda se apodera del público y de esta noche que promete ser inolvidable. Con “Люди Надоели” podemos sentir la caja de ritmo rebotando en nuestros cuerpos, mientras la guitarra armoniza el sustento del bajo, el público estalla en ovaciones realizando los típicos canticos tan característicos de nosotros.

La atmósfera que se crea en el momento que aparece “Тоска” con cuatro elementos es simplemente hipnótico, el público se mueve como si fuese una marea humana.
“Ответа Нет” y “Удалил Твой Номер”, de su último álbum, nos entrega la calma del frío y la nostalgia, Egor logra transmitir a la perfección la sensibilidad y la melancolía que los ha caracterizado, acompañado de melodías bailables y profundas.

Bajo una luz roja comienza el tema marcado por el bajo “Я Не Коммунист”, el cual habla de cómo fue la vida bajo el sistema comunista en aquellos años en esos territorios, con una peculiar coreografía de bajo y guitarra que acompañan la envolvente métrica. Se da paso a la calma y la nostalgia con “Обречен” de su último álbum, un público que responde en silencio, expectante, dejándose envolver por el sentimiento de la canción, que trasciende más allá del idioma. Un bajo repetitivo sostiene la caja de ritmos, la guitarra y la voz, entregándonos “Ленинградский Блюз” la banda hace un quiebre, un pequeño juego entre guitarra y bajo, para luego terminar el tema entre aplausos y gritos, los cuales reciben “Любить и Выполнять” tema con el cual cierran su álbum del 2020. A estas alturas Molchat Doma tiene al público rendido a sus pies, con un excelente entramado de sus tres discos, han hecho estallar y caer en la quietud a un Caupolicán repleto. Es momento de “Дома Молчат” donde el tema sale de su estructura ya conocida para entrar en un pequeño juego entre Roman y Pavel, el cual alarga la canción terminando por reventarla al fanal de la misma, haciendo que el teatro por completo los aplauda de pie.

“Волны” se hace presente haciendo bailar a todos sobre los escombros de lo que queda del Caupolicán, con una fórmula perfecta, este trio hace sacudirse y regocijarse canción tras canción.
La calma vuelve con “Крыши”, nuevamente el bajo sostiene los demás elementos, los cuales nos invitan a una pausa, a contemplar como la voz y los demás elementos nos envuelven en una neblina cálida y aletargada.

“Утонуть” nos reencuentra con sonidos a lo que evocan a los primeros trabajos de Depeche Mode, como también todo lo que fue el Eurodance de los 80s, volviendo a mover al público el cual responde enérgicamente. “Тишина” la gente disfruta en silencio de la melodía reposada, poco a poco el recinto de va iluminando, las linternas de los celulares se van prendido poco a poco hasta disipar la oscuridad del lugar. 

Roman Komogortsev sorprende a la fanaticada con un guiño a la banda The Cure con la intro de A Forest, y cuando todos pensamos que gran cover harán, entra de lleno “Танцевать” a romper lo que quedaba en pie del teatro, todo el público bailando uno de los temas iconos de este trio.

Con una caja de ritmos robusta y potente, sostiene a un bajo energizante que dinamiza la fórmula con “Не Смешно”, pavimentando la pista de baile para que la gente pueda seguir disfrutando de esta gran banda. Nuevamente aparecen estos recortes que nos recuerdan a la movida del Eurodance y el Techno de los 80s con “Дискотека”. Un juego de sonoridades entre los sintetizadores, llama la atención ya que se escapa de lo que nos vienen mostrando hasta ahora. Este momento de alargue  es la puerta de entada para uno de sus mayores éxitos “На дне” el tema que da inicio su álbum del 2018 “Этажи”.
La banda hace un quiebre en su presentación, para entregarnos su gran éxito “Судно”, canción viral en redes sociales, la cual llego a posicionarse dentro del segundo puesto en Spotify Global Viral.

Molchat Doma dio un espectáculo de alta calidad, tanto en la puesta en escena como en su sonido y el público respondió entre aplausos, gritos, baile y ovaciones, coronándose como la gran banda de Post-punk del último tiempo y lo mejor de todo, demostrándolo en vivo sobre el escenario.