Texto por: Franco Zurita
Fotografía: Joselyn Heyden
Tras ocho años de espera, una de las bandas más influyentes en la escena alternativa del Rock y el Pop de finales de los 90’s pisó nuevamente suelo nacional para hacernos vivir una hermosa noche llena de clásicos, recuerdos y toda la honestidad musical de Francis, Dougie, Andy y Neil, quienes embarcados en su «Raze The Bar Tour», una vez más, encantaron e iluminaron el corazón de los cientos de fanáticos que se apostaron en el Coliseo del Parque O’Higgins para revivir en cada una de las interpretaciones de los escoceses. Desde temprano, poco a poco se fueron colmando las afueras del Movistar Arena. Las poleras de Travis comenzaban a aparecer y los fanáticos arremetían en su ingreso al recinto ya entrada la tarde para ser testigos de una velada inolvidable.
Para ambientar la espera y representar al Rock nacional, Angelo Pierattini fue el encargado de abrir los fuegos en un formato muy especial. A tono con la atmósfera delicada y acústica de la velada, el músico lejos de los riffs y la distorsión, demostró su faceta más melódica, incursionando en boleros y distintas tonadas, transformando, enriqueciendo su repertorio y demostrando el virtuosismo y entrega de Angelo para con la música. Una faceta que ya tiene un trabajo de años y que cada vez, se consolida aún más.
Una vez finalizada la presentación del nacional, era el turno de los protagonistas de la noche. Ya con un público totalmente apostado, el resplandeciente blanco del escenario y una gigantesca esfera como telón de fondo, dieron la calurosa bienvenida a Travis quienes sin preámbulo alguno, comenzaron a desplegar toda su maravilla musical emocionando de entradas las miles de almas que acompañaron a la banda en cada una de sus declaraciones. «Bus», pieza inicial de su último trabajo “L.A Times” dio comienzo a este maravilloso recorrido a través de todos sus éxitos y las distintas etapas del cuarteto escocés. Un recorrido lleno de emociones, recuerdos y por supuestos, clásicos imbatibles que aún siguen sonando y resonando en la memoria y en el corazón de muchos de nosotros.
«Love WIll Come Through» fue uno de los primeros clásicos de la noche, meciendo los cuerpos y llegando al corazón de todos los presentes, quienes al ritmo de la guitarra y de los suaves acordes de Francis, nos reconfortaba la idea de que el amor, tarde o temprano llegará. «Good Feeling» y «Good Day To Die» nos transportaron a los primeros años de Travis. Extraídos de su disco debut, estas joyas de su primer álbum fueron un abrazo para los más fanáticos que acompañaron cantando al unísono estas y todo lo que Francis y compañía lograron entregarnos en casi dos horas de show.
Un momento bastante especial vivimos en la medianía del concierto. La tríada perfecta de singles que catapultaron y consolidaron la carrera de Travis, las magistrales: «Side», la reconocida «Sing» y la hermosa «Closer», que fue dedicada a petición de Francis, a todas esas personas, esos amores que a pesar de la distancia o de las distintas situaciones, necesitamos más y más cerca. Todo eso, acompañado de un apagón total del recinto que resplandeció bajo las linternas de todos los dispositivos presentes.
Ya en la última parte, su último trabajo se tomaría la posta del show para darle rueda a «Raze The Bar», «Gaslight» y la íntima «Naked in New York City» cerrando así con lo más reciente del cuarteto y preparando el emocionante cierre para la interpretación de otro clásico de antaño de Travis, la gran «Turn». Por supuesto y como estaba todo previamente preparado, en su vuelta al escenario, Francis acompañado de Dougie dieron rienda suelta a un clásico del Pop de los 2000’s. «Baby One More Time» de Britney Spears comenzaba a sonar entre acordes de guitarra y sutiles voces, dándole un toque acústico y no menos intenso a esta pieza. Canción que por supuesto, fue coreada por todo el recinto y que por fin, muchos tuvimos la oportunidad de ver y cantarla en vivo junto a Travis.
«Flowers in The Window» y «My Eyes» siguieron adornando la noche para dar pie a una de mis canciones favoritas del cuarteto. La emocionante y liberadora «Selfish Jean» ponía a bailar y sacudir a todo el Movistar Arena liberando toda la energía acumulada tras esta inolvidable noche. Una mágica velada que culminó entre abrazos y diversas emociones con la gran «Why Does It Always Rain On Me?» coronando la noche con la complicidad de todos sus fanáticos y una explosión de sentimientos que solo Francis y compañía pueden hacernos vivir y sentir.
De esta manera, guardamos en nuestras memorias una nueva visita de Travis a nuestro país. Un concierto que nos llevó a visitar nuestros más íntimos recuerdos y revivir todas esas emociones a través de un viaje atemporal y emotivo por el camino que han recorrido a través de nuestras vidas. Con su música honesta y su indiscutida sencillez, Travis, con más de veinte años de carrera, han sabido y comprendido como tocar nuestros corazones.
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Setlist:
01. Bus
02. Driftwood
03. Love Will Come Through
04. Alive
05. I Love You Anyways
06. Good Feeling
07. Good Day to Die
08. Writing to Reach You
09. Side
10. Closer
11. Sing
12. Re-Offender
13. Raze the Bar
14. Gaslight
15. Naked in New York City
16. Turn
-Encore-
17. …Baby One More Time
18. Flowers in the Window
19. My Eyes
20. Selfish Jean
21. Indefinitely
22. Why Does It Always Rain on Me?
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