Por: Lucas Araya

Una noche de fiesta y reencuentros se vivió en el clásico local de San Diego cuando Miguel Mateos descargó una verdadera batería de hits y clásicos del repertorio propio del rock latino para celebrar cuatro décadas de música y entrega.

Con una potente entrega escénica, una banda sólida y consistente, Mateos desplegó un setlist que abarcó desde su primer hit radial con Zas hasta sus canciones más recordadas de su etapa solista, con fuerte apego a la etapa noventera de su carrera.

Con teatro repleto desde temprano y una multitud efusiva, energizada y motivada de principio a fin (donde varias generaciones coreaban y compartían la pasión por el trabajo del músico argentino), el show avanzó entre canciones de alta intensidad, momentos bailables, la calma y delicadez de algunas baladas y el vuelo de hits que atravezaron las fronteras del tiempo y del continente americano. Especial fuerza se vivió con Llámame si me necesitas, Solos en América, Atado a un sentimiento, Obsesión y Tirá para arriba.

Con referencias a su extenso periplo musical, los años difíciles de Argentina (y el resto de América), su primera visita a Chile y lo vivido a través de la pandemia, el cocierto tuvo un relato comprendido y compartido con sus fans, quienes respondieron con muestras de afecto, palmas y cantando a todo pulmón.

Un golpe de energía y amor en una noche que tuvo a un referente de una época dorada del rock y pop hecho en Latinoamérica. Miguel Mateos dejó un aura de aliento, algo necesario en momentos de incertidumbre, donde solo queda tirar para arriba y poner huevos.

La gira de 40 años tendrá dos fechas mas 

durante este fin de semana largo en Chile.


Zumbido.cl

0 Comments

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *