Texto por: Daniel Sáez
Fotografías: Hugo Hinojosa
La noche de este martes presagiaba un gran encuentro con el Heavy y el Power metal, gracias al esperado regreso a tierras chilenas de Blind Guardian, agrupación que no se presentaba en Chile desde 2015. Ya desde temprano se fueron reuniendo los fanáticos y fanáticas expectantes de ver a los «bardos», sin embargo, el show comenzó un poco más temprano con la participación de los nacionales «Enigma», quienes comenzaron su show mostrando parte de su primer disco, recientemente editado en vinilo. En palabras de Álvaro Paci, guitarrista de la agrupación, era su primera oportunidad en el Teatro Caupolicán y se demostró con un show enérgico al que el público respondió respetuoso y acompañando con sus puños.
Su presentación continuó con un recorrido por su propia discografía, mostrando temas de «Voces disidentes» o «Laberinto», algunas de las cuales no tocan muy habitualmente. Entre su set destacamos temas como «Inquisidor», donde hubo momento para agradecer al público por el apoyo brindado a la presentación. Y es que, a pesar de la acotado de la intervención, Enigma fue capaz de motivar a quienes desde un poco más temprano fueron ocupando las diversas ubicaciones, los cuales desde el comienzo de su presentación se mostraron respetuosos con el cuarteto nacional, y los despidieron entre aplausos.
Pero el plato principal aún no estaba servido. Ya cerca de las nueve de la noche, el teatro estaba casi repleto, y disimuladamente se asomó por el costado del escenario Hansi Kürsch, vocalista y líder de los alemanes, pero su presencia no pasó inadvertida para la primera fila, quienes de inmediato comenzaron a corear su nombre, presagiando cuál sería la tónica de la noche. Así, luego de una breve intro instrumental, comenzaron los acordes de «Imaginations from the other side»¸ clásico de 1995 que encendió las llamas de una hoguera que no se extinguiría en toda la jornada. Saltando a su más reciente trabajo, «The god machine» (2022), sonó la potente «Blood of elves», donde desde su inicio se mostró un locuaz Kürsch¸ quien constantemente bromeó entre el público y la banda, además de ir presentando cada canción.
¿Cuántos temas bastarían para que toda la audiencia se rindiera a los pies de la agrupación? Sería su tercer tema, la emotiva «Nightfall» donde el pacto entre los alemanes y su público chileno se sellaría definitivamente. Pero sabemos que parte del sello de la banda es su velocidad y potencia, lo cual quedó demostrado con la abrumadora «The script for my requiem», donde la asistencia no sabía si corear, saltar o levantar los puños. Una breve pasada por canciones más contemporáneas como «Skalds and shadows», o la más nueva «Deliver us from evil» fueron la antesala para otro himno como «Time stands still (at the iron hill)», que sonó majestuosa como puede ser la obra de Tolkien desde donde se basa. Un último saludo a «The god machine» con «Secrets of the american gods» sirvió como preludio a lo que solo podría clasificarse como un final apoteósico.
Primero, vendría uno de los momentos más esperados por todo/a fan de Blind Guardian, con la interpretación de «The bard’s song – in the forest», donde Hansi hizo silencio para que su público cantara a todo pulmón, en uno de los grandes momentos de la noche. El ambiente medieval plácido sería reemplazado rápidamente por otro himno de su primer disco. De tal modo, arrasó con todo Majesty, dejando un enorme moshpit en medio de la cancha, el que continuó con «Traveler in time», causando gran algarabía y emoción, para luego despedirse por primera vez del escenario. A estas alturas la interacción entre la banda y su público se traducía en cánticos de celebración, y halagos constantes por parte de los alemanes.
El rápido regreso vino con «Sacred worlds», pero nuevamente vendrían sorpresas. Primero, sería otro momento íntimo con «Lord of the rings», para luego presentar el gran regalo de la noche. Recordando la promesa realizada hace ya ocho años, decidieron pagar su deuda con «Run for the night», canción que no era interpretada por la banda desde hace veinte años, y mostrando el cariño que le tienen a este lado del mundo.
El cierre definitivo del espectáculo sería por todo lo alto, primero, con la interpretación de «Valhalla», que como ya es habitual terminó siendo coreada casi a capella por todo el público, como si fuera del descanso luego de la destrucción absoluta. Pero el final no podía bajar la intensidad y la épica de «Mirror mirror» inundó cada rincón del teatro. Entre moshpits, puños en alto y alegría desbordada, la banda se despidió definitivamente de Chile (con la promesa de volver prontamente) entregando uno de sus mejores shows a la fecha, y sellando una relación que ya lleva décadas, pero que no deja de crecer.
Puedes ver la galería de fotos completa de este evento aquí.
Setlist:
01. Imaginations From the Other Side
02. Blood of the Elves
03. Nightfall
04. The Script for My Requiem
05. Deliver Us From Evil
06. Skalds and Shadows
07. Time Stands Still (At the Iron Hill)
08. Secrets of the American Gods
09. The Bard’s Song – In the Forest
10. Majesty
11. Traveler in Time
-Encore-
12. Sacred Worlds
13. Lord of the Rings
14. Run for the Night
15. Valhalla
16. Mirror Mirror
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