Texto por: Adolfo Serey
Fotografías: Hugo Hinojosa
Transformado en un el más reciente templo del Metal, el Club Blondie resuena en sus paredes muchas historias, así como conciertos. El día de ayer no fue la excepción, puesto que los músicos de Angra vuelven para celebrar 30 años de mítica historia de Power Metal, raíces negras y latinas y el gran soplo del progresivo.
Pero la embarcación dorada del Power Metal Latinoamericano no buscaría su rumbo sin antes ser antecedidos por la banda chilena Enigma compuesta por César Yuivar, Álvaro Paci, Sebastián Bello y José Vásquez los que nos presentaron alrededor de 45 minutos de Heavy Metal a la vieja usanza.
Las paredes retumbaban por la energía derramada y pedían a gritos la banda cabeza de cartel: ¡ANGRA, ANGRA, ANGRA! resonaba en el profundo abismo hasta que emergió la tonada de «Newborn Me», la banda comenzó a salir al son, uno a uno hasta repletar el escenario, cuando rápidamente entró Fabio Lione en escena. El público se volvió loquísimo entre música y apoyo visual y no hubo pausa al terminar, ya que comenzó a sonar «Nothing to Say», el enraizado tono afrolatino del 94’. Si era una explosión de dicha el primer tema, el que le sucedió encendió los corazones de todos los asistentes al traer el pasado como abrazador del antiguo metal. Pero si creíamos que no podrían estar más desbordados llega hasta sus sentidos «Angels Cry»… ufff, esto se volvió una fiesta garota.
En una milésima de pausa Lione dijo: “muchas gracias por estar aquí, Santiago, esta noche celebraremos 30 años de historias”. En ese preciso momento comenzó a sonar lo más progresivo y nuevo de la banda: «Travelers of Time». El futuro se hizo más parte que nunca y Lione sacó a relucir su inquieto espíritu explorador. A su término, Fabio protagonizó un nuevo monólogo. “Lo que viene a continuación es muy familiar para ustedes, algo perdido en el tiempo de «Fireworks» (1998)” la audiencia exclamó “Ooooh” a lo Lione añadió: “Ven, ustedes saben de qué se trata”, en eso comenzó a sonar «Lisbon».
La intempestiva marea de sonidos diacríticos nos remeció por cuatro mares diferentes: «Rebirth», «Winds of Destination», «Lease of Life» y «Black Widow’s Web». Posterior a esto, los músicos bajaron del escenario, los roudies comenzaron a implementar la nueva escenografía: “una silla, un pedestal y un solitario micrófono”. Rafael llegó en solitario, las luces se apostaron sobre él, y dijo: “En las giras he aprendido unas cosas hermosas, los lugares, la cultura local (…) como por ejemplo a decir ´Concha su madre` y una frase que les encanta ´Saco weas´” El público comenzó a reírse de algo tan propio de nuestra idiosincrasia. A lo que agregó. “Esta canción se llama ´Concha su madre´ «Reaching Horizons» (Acústico)«. Al terminar esta canción entre risas y clamor Rafael se puso serio -mientras se incorporaba una segunda silla-. Rápidamente se sentó Fabio, observando al público. Rafael esperó a que el iluminado escenario decayera ante la suave luz en la penumbra, a lo que dijo: “ Esta canción, lo que haremos es un homenaje a mi querodo amigo, Andre Matos, que ya no está con nosotros”, a lo que Fabio añadió. “Yo conocí a Andre Matos, SÍ, SÍ, SÍ. Un querido y respetado músico, gran artista y persona, esto es para él”. Sin demora, el público comenzó a aclamar a los dos artistas cuando fueron interrumpidos por «Make Believe» en una hermosa versión acústica, conmovedora y cautivadora hasta las lágrimas.
Luego de 4 minutos de conmovedor duo de cuerdas vocales y acústicas, Fabio Lione interrumpió el silencio preguntando: “¿Ya están cansados?” a lo que el público se negó con un rotundo “¡NO!” que retumbó como un trueno contra el escenario que presentó cuadro maravillas: «Waiting Silence», «Bleeding Heart» y «Magic Mirror» y una gran despedida: “En las cuerdas, enérgico Marcelo Barbosa. Más de 20 años llevando el peso de las cuerdas, Felipe Andreoli. La joven promesa de la banda, el gran chico de oro, Bruno Valverde”, Lione se toma una pausa al presentar la banda, y dice: “Si no fuera por este hombre, no estaría acá, el gran Rafael Bittencourt”. A lo que Rafael señaló: “Gracias por ser parte de esto Fabio, tú ya eres uno de los nuestros”. Con esta última frase se despidieron del nocturno show y de verdad creímos que no volverían.
La resignación se comenzaba a apoderar de los asistentes cuando, entre la obscuridad surgió el inconfundible «Unfinished Allegro». La alegría corrió por cada espacio de eximido aire circundante. Los músicos volvieron a su lugar con la voz de Fabio Lione, y dijo: “Esta es la última de la noche ¿O no?”. Los riff se apoderaron de la oscura puesta en escena y las luces destellaron con «Carry On». Todos explotaron de emoción, entre alegría y coros. Más de 5 minutos y el término se avecinaba, cuando de pronto sonó «Nova Era» para dar término a todo.
Setlist:
01. Newborn Me
02. Nothing to Say
03. Angels Cry
04. Travelers of Time
05. Lisbon
06. Ego Painted Grey
07. Late Redemption
08. Rebirth
09. Winds of Destination
10. Lease of Life
11. Black Widow’s Web
-Acústico-
12. Reaching Horizons
13. Make Believe
14. Waiting Silence
15. Bleeding Heart
16. Magic Mirror
-Encore-
17. Carry On
18. Nova Era
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